No fue el día de Patricio O’Ward en IndyCar Series, al terminar decimosexto en el Gran Premio de Long Beach, en California. La victoria fue para Scott Dixon, quien superó a Colton Herta y a Alex Palou en el podio.
El seis veces campeón, quien acabó noveno en San Petersburgo, vino mejor para la segunda carrera del calendario y se coloca segundo en el campeonato, por detrás de Josef Newgarden, quien fue líder en St. Petersburg y acabó cuarto en Long Beach. Pato, quien fue segundo en la primera carrera del año, se vio afectado con este resultado, al bajar a la sexta posición de la clasificación.
La carrera
El inicio fue de por sí difícil para el mexicano, al comenzar desde la decimocuarta posición. Will Power se lanzó por el exterior de la curva 1 y le quitó el liderato a Felix Rosenqvist, quien fue perdiendo ritmo de carrera con los neumáticos duros y bajó a la sexta plaza.
En la largada, Scott Dixon subió una posición y Christian Rasmussen se fue quedando atrás. Alexander Rossi ingresó a los pits para una parada muy temprana debido a un contacto con O'Ward, quien cumplió una penalización en los boxes en el giro 11 por dicho incidente y eso comprometió su carrera: regresó hasta la posición 26 y de ahí no pudo acercarse a posiciones más privilegiadas, la remontada se volvió en algo imposible.
Una bandera amarilla en la vuelta 16 salió debido a la pérdida de control de Rasmussen al irse contra el muro; un encontronazo con Jack Harvey provocó daños en el lateral de Dale Coyne. En la vuelta 19, Power cambió por compuestos duros y cedió el liderato provisional a Josef Newgarden.
La carrera se reanudó en la vuelta 20 con bandera verde y Dixon superó a Power con los neumáticos suaves, con lo que le sacó cuatro segundos de ventaja. El piloto no volvió a ceder y se llevó la victoria el Long Beach, con Pato conformándose con la decimosexta posición, dos menos en comparación con la plaza en la que arrancó.
ZZM