Veinte años atrás, justo en el 2000, los amantes mexicanos al deporte motor tenían sus ojos centrados en Estados Unidos. Aunque la Fórmula 1 seguía cautivando sus corazones, en el vecino país del norte Adrián Fernández vivía su mejor temporada dentro de Champ Car, peleando el campeonato hasta la última carrera de esa campaña.
El título se escapó de las manos de Fernández por 10 puntos, cerrando su temporada con el segundo general. Si bien varios pilotos siguieron sus pasos por muchos años como Roberto González, Michel Jourdain Jr., Mario Domínguez, Luis Díaz o David Martínez, el interés de las nuevas generaciones se centró en llegar a Europa, dejando de lado el sueño americano.
Patricio O'Ward durante una carrera [IndyCar]
El nuevo enfoque dio como resultado que Sergio Pérez y Esteban Gutiérrez alcanzaran el Gran Circo, pero trajo una carencia de pilotos locales en IndyCar.
Dos décadas después de aquella temporada de Fernández, un nuevo nombre mexicano figura en el panorama de la serie estadunidense: Patricio O’Ward. El regiomontano de 21 años vive su primera temporada completa en la categoría y, después de las primeras seis carreras de 2020 se ubica cuarto en el campeonato de pilotos con 162 unidades, contra 244 del múltiple monarca, el neozelandés Scott Dixon.
“Estar peleando por el campeonato te cambia la mentalidad. Tienes que llegar a todos los fines de semana y concluir las carreras, además tienes que obtener puntos en cada competencia”, expresó O’Ward luego de su última carrera en Iowa, un fin de semana en el que en las dos competencias peleó no solo por estar dentro de los tres primeros, sino también por la victoria.
El destino
El éxito de O’Ward en Estados Unidos no es obra de la casualidad. Gran parte de su historia en el automovilismo ha estado marcada en aquel país, desde sus inicios en la Pro Mazda Championship, pasando por el campeonato que obtuvo en la serie IMSA en 2017 hasta el título en la Indy Lights, antesala de IndyCar en 2018, corona que en su momento le aseguró un lugar como piloto titular para la temporada 2019 de la máxima categoría de monoplazas en aquella nación.
Patricio O'Ward [IndyCar]
El acuerdo que tenía el año pasado para competir con el equipo Harding se cayó de último momento, dejándolo en un territorio incierto y con pocas opciones. Al final, un asiento en la estructura de Carlin le permitió participar en siete carreras de la temporada antes de que Red Bull Racing lo escogiera en un intento por llevarlo a la Fórmula 1, una historia que no prosperó, pero que le permitió colocarse en los ojos de McLaren, quienes preparaban un regreso a Estados Unidos para revivir viejas glorias en IndyCar.
O’Ward, junto con el estadunidense Oliver Askew, fueron seleccionados para ocupar esos dos asientos en 2020.
“El año pasado fue muy loco y este año, lo que más me importa es que sé dónde estoy y lo que haré, tener los objetivos claros para estar empujando. No es como si tuviera una sola carrera y después no supiera qué va a pasar. Es importante tener objetivos y trabajar en ellos”, dijo el mexicano.
Nueva mentalidad
Al arrancar la actual temporada, O’Ward quedó fuera de los 10 primeros en Texas, pero ese resultado pronto quedó en el olvido cuando en la segunda prueba en Road America, cuarta carrera, consiguió su primera pole position y peleó por la victoria hasta el final.
Patricio O'Ward [IndyCar]
A partir de ese momento, dejó de ser un piloto que aspiraba a pelear en la parte delantera para convertirse en el contendiente del equipo Arrow McLaren SP al título.
“Después de Texas no ha pasado mucho. Nos hemos preparado muy bien y hemos dado un paso a donde debíamos estar compitiendo. Yo sabía que teníamos todo para estar compitiendo en frente, era solo calificar ahí para pelear por esas posiciones. Cuando te enseñas a ti mismo y al equipo que pueden ser protagonistas del campeonato, cambia la mentalidad. Creo que la mentalidad llegando a un fin de semana es que se hace más importante terminar todo. Queremos ganar carreras, estar en el podio y para eso vamos a estar empujando”, expresó.
La competencia del 8 de agosto en Mid-Ohio marcará la mitad de temporada para él, será el momento de demostrar que está preparado para mantenerse en la contienda por el campeonato, pero también de ajustar cuentas con las 500 Millas de Indianápolis, carrera en la que no participó en 2019 luego de quedar eliminado junto con su compañero Fernando Alonso, quien en 2020 estará de nuevo a su lado.