Son cada vez más las mujeres las que comienzan a brillar en el deporte motor, y el talento que surge en México da mucho de qué hablar. Tal es el caso de Ximena Labastida, piloto chihuahuense de 13 años que hará historia en NASCAR México Series, cuando debute en el inicio de temporada de Trucks México Series, el campeonato de camionetas más importante de México y Centroamérica.
Labastida creció con el automovilismo como principal referente: su padre, José Labastida, es un aficionado al deporte motor y la apoyó en cuanto ella expresó su interés, incluso le dio su primer kart Maranello, el cual se convirtió en el aliciente de su carrera. “Salí con un amigo y lo vi correr en karts, le dije a mi papá que quería intentarlo y me apoyó”, confesó Ximena en entrevista con MILENIO-La Afición. “Comencé en kartismo desde muy pequeña como una novata, pero me acoplé muy bien en el chasís y sentí la adrenalina, ya fue como a los 11 años que competí oficialmente y me gustó mucho”.
Ha participado en diferentes campeonatos como Karting X30, pero su gran oportunidad llegó con Trucks México Series, cuando el equipo potosino Dynamic Motorsports la confirmó para correr con el auto número 33 y disputar la carrera en el Súper Óvalo Chiapas, un circuito de 1.2 kilómetros ubicado en Tuxtla Gutiérrez. “Voy a ser la más chiquita en el automovilismo en México; la verdad es que sí me da nervios, pero también mucha emoción por correr y competir ante muchos otros buenos pilotos”, aseguró.
Ximena se considera una chica tranquila que le gusta pasar el tiempo con sus seres queridos. Eso sí, su lugar favorito es precisamente dentro del coche, donde sentimientos chocan entre sí y donde se siente segura… aún a cientos de kilómetros por hora. La adolescente encontró en el automovilismo su catarsis.
“Cada vez que corro siento muchísima adrenalina… es entre temor, miedo, suspenso y mi concentración, que se pone al máximo. Son muchas emociones encontradas las que tengo y a veces no tengo palabras suficientes para describir, pero las carreras y el coche son mi escondite”, reflexionó.
Busca ser inspiración
Gran parte de este importante avance en su carrera se debe a la amistad que tiene con la piloto de 19 años Regina Sirvent, quien fue la primera mexicana en entrar al programa NASCAR Drive for Diversity, quien corre en Estados Unidos y que ha tomado un papel como mentora de Ximena.
“Regina es muy cercana, me enseña mucha carrera, frenadas, seguimiento en pista, la verdad es que espero seguir sus pasos, porque ella es muy joven y ya ha conseguido muchas cosas en el automovilismo, pone en alto el nombre del país”, considera Labastida.
Y así como Sirvent le ha generado confianza y la ha motivado a seguir sus sueños y tratar de superarse en la pista, Ximena espera que su historia sea el impulso anímico que las niñas necesitan para enfrentar los retos y luchar para cumplir sus sueños, sobre todo en un deporte como el automovilismo, que por mucho tiempo se tuvo la idea de que era exclusivo de hombres, hasta que exponentes como Regina, Labastida o Tatiana Calderón –primera piloto de tiempo completo en IndyCar y piloto de pruebas en Fórmula 1– han dado pasos importantes para derribar esos estigmas.
“La verdad es que en deporte no hay género, la mujer como tal no es un género en el deporte motor”, reflexiona. “Yo soy de la idea de que no importa si una niña o un niño está detrás del casco. Al final de cuentas, lo que importa es qué tan bien corras en el auto. Yo les digo a todas las niñas que tenemos las mismas capacidades que ellos y podemos lograr lo que nosotros queramos. Somos pocas mujeres y esperamos ser inspiración”.
Aún le queda mucho camino por delante en su carrera, pero ella espera tener todo lo necesario para que sea una trayectoria exitosa y, sobre todo, una historia que demuestre que el deporte motor está listo para la apertura a las competidoras.
“Sí me gustaría (ser inspiración para el público femenino), porque significa que las mujeres lo estamos logrando y estamos dándole seguridad a las demás mujeres, que la podemos romper en cualquier cosa que nos queramos”, culminó.
MGC