Fue el primero de la era abierta. El 8 de septiembre de 1968 Arthur Ashe se convirtió no solo en el primer campeón de raza negra de Grand Slam al derrotar en cinco sets al alemán Tom Okker, si no que fue igual de importante ser el primer campeón de la era profesional cuando el US Open se comenzó a evolucionar en lo que conocemos hoy.
En aquel entonces el escenario era Forest Hills y fueron 96 hombres y 63 mujeres los inscritos por un premio monetario total de 100 mil dólares. En la rama femenil fue Virginia Wade quien consiguió su primer grande al derrotar a la campeona Billie Jean King. Coincidentemente ambos campeones conquistaron en su momento Wimbledon y el Abierto de Australia, pero no pudieron pasar de cuartos en Roland Garros.
Aquel año es recordado como un parte aguas para la sociedad norteamericana. Tragedias y triunfos polarizaron a ciudadanos en medio de la guerra de Vietnam. Si bien en México tenemos presente los acontecimientos del 2 de octubre en Tlatelolco y los Juegos Olímpicos en la capital, en Estados Unidos había sido asesinado Martin Luther King y más tarde Robert F. Kennedy.
A su vez el Boeing 747 se presentaba al mundo y cambiaría la dinámica de vuelos. Nixon ganó las elecciones y Apollo 8 se convirtió en la primera nave con humanos en orbitar la luna. El 911 era introducido en EU y los Beatles lanzaban el White Album. Todos estos hechos eran presentados al mundo a través del auge de la televisión. Así de histórico fue este año, año en que la era abierta del deporte blanco comenzó.
JMRS