El Abierto de Australia entra a su fase de tercera ronda con uno de los máximos favoritos aún en competencia. Novak Djokovic logró vencer con apuros al francés Enzo Couacaud, No. 191 del mundo, donde a pesar de ganar tres sets de manera contundente, 6-1, 6-7 (5/7), 6-2, 6-0, sufrió en el segundo con un tie break que terminó por perder ante un gran saque de su oponente que además contó con gran parte del apoyo de la grada en la Rod Laver Arena.
El serbio, que además tuvo que ser atendido en los vestidores por molestias en la isquiotibial de su pierna izquierda, lesión que lo aqueja desde la final de Adelaida, también perdió como pocas veces la paciencia y se quejó con el juez de silla sobre unos aficionados que lo estuvieron molestando. Ya en un punto a su favor incluso se colocó la mano en la oreja a manera de sarcasmo para escuchar mejor ya sea el apoyo o las quejas de la afición.
El ex No. 1 del mundo, que busca su revancha en Australia, pidió la expulsión de un espectador alegando “Este hombre está borrachísimo, desde el primer punto está provocando. No está aquí para ver tenis” en medio de abucheos generales. Después de una explicación de la mejor manera en que pudo manejarla Djokovic, el juez de silla, Fergus Murphy, tomó cartas en el asunto y el seguidor fue invitado a dejar el estadio.
Ahora se enfrentará a Grigor Dimitrov en su lucha por el décimo título en el primer major del año y su número 22 para alcanzar a Rafael Nadal. En caso de vencer en la final además superaría en títulos totales, 93, al español.
DAO