Ni siquiera las mejores jugadoras del mundo son inmunes a los nervios, como descubrió Iga Swiatek el martes, cuando sus sueños en Wimbledon se hicieron añicos al caer en cuartos de final por 7-5, 6-7 (5-7) y 6-2 ante Elina Svitolina.
La ucraniana Svitolina, que regresó a la competición en abril tras dar a luz a su hija en octubre, perdía 5-3 en el primer set y tuvo problemas con su servicio en la Pista Central.
Sin embargo, la dinámica cambió de repente a favor de Svitolina, que desde un 0-30 con su saque en el noveno juego ganó 16 de los 18 puntos siguientes para adjudicarse el primer set y dejar atónita a Swiatek.
Después de que Svitolina cerrara el parcial, las jugadoras tuvieron que soportar una pausa de 20 minutos mientras se cerraba el techo para tapar las oscuras nubes que se cernían sobre la Pista Central.
Ese intervalo dio a Swiatek la oportunidad de reevaluar sus tácticas y se puso 2-1 por delante en el segundo set. Pero su rival recuperó el cierre para dejar el parcial 3-3 y ninguna pudo sacar ventajas, llevando la definición al "tie-break".
Svitolina se puso 4-2, pero Swiatek se recuperó para poner las cosas iguales.
En el parcial definitivo Svitolina, que ya había derrotado a tres campeonas de Grand Slam antes de enfrentarse a Swiatek, sacó a relucir todo su arsenal de golpes para meterse en las semifinales de Wimbledon por segunda vez en cuatro años y poner fin a la racha de su rival de 14 victorias consecutivas.
ZZM