El matador valenciano Enrique Ponce tuvo su primera comparecencia después de 16 años de ausencia en Guadalajara, y lo hizo ante los medios previo a su corrida del domingo ante el gran juez que es el público mexicano.
“El poder volver a Guadalajara, que es de las mejores aficiones no solo del país, sino del mundo, tengo de recuerdo esa manera en que la afición paladea el toreo bueno”.
Con una larga carrera como matador de toros y vigencia actual, Ponce comentó que “llego en el mejor momento de mi vida taurina ante una afición exquisita como es la de Guadalajara”.
Sobre los motivos de su ausencia en la Nuevo Progreso, de los cuales mucho se especula por diferencias con el grupo Bailleres, señaló que “fueron circunstancias del toreo que me alejaron, unas por distanciamientos, otras porque no te llaman. Pero lo más importante es que estamos aquí”.
Refiriéndose a su vigencia tras tres decenios de estar en la cúspide, explicó que se debe a la búsqueda constante de llegar a la perfección.
“Siempre trato de evolucionar en la forma de interpretar el toreo, ya me han tocado varias épocas, poco tiene que ver el toreo de los años noventa a lo de ahora. Siempre busco la perfección en el toreo, en eso he encontrado la base de la evolución mía. El toreo es evolutivo como muchas de las artes”.
“Los toreros tenemos que adaptarnos a los nuevos tiempos, y como todo arte es inexplicable, unos llegan otros, no, unos se mantienen, otros no. El toreo es transmitir emociones, y cuando una plaza como Guadalajara tiene la sensibilidad para captar el toreo bueno, no es una plaza difícil, sino que le gusta lo bueno y no se conforma con menos”.
La manera en que concibe la tauromaquia la resumió como “torear es sacar a pasear el alma, y eso es lo que busco que sienta la gente”.
El valenciano hizo el símil de la plaza de Guadalajara con la española de Bilbao, donde se exige el trapío de los toros, pero donde también se aprecia a los toreros. No está peleado ser una plaza torista, con ser torerista también, en opinión del matador español.
De manera tajante, Enrique Ponce rechazó tener injerencia en la aceptación o rechazo de ciertos toros o ganaderías. “Para eso me anuncio desde el principio con otra ganadería (en relación a los toros rechazados de Jaral de Peñas)”.
Sobre el toro mexicano expresó que es para “toreros muy buenos” y no cualquiera puede triunfar con ellos.
SIN TOROS TODAVÍA
Hasta el cierre de esta edición prevalecía la incertidumbre sobre la procedencia del ganado para la corrida del domingo, dado que del encierro de Jaral de Peñas, anunciado originalmente, el juez de plaza, Arnulfo Martínez, solo había autorizado a dos toros, ante esta situación, el ganadero de dicha dehesa, decidió retirar sus toros de la plaza, por lo que el coso tapatío se quedó sin el protagonista principal para la realización de una corrida de toros.
Por medio, de un escrito firmado por el gerente operativo de la Nuevo Progreso, Jorge de los Reyes, la empresa solicitó a las autoridades de Guadalajara una prórroga de 24 horas para recibir un encierro completo en virtud que “hemos traído esta semana doce toros (incluye otras ganaderías), que por diversas circunstancias solo han sido aprobados cinco”. El documento está suscrito con fecha del primero de noviembre, por lo que dicha prórroga vence este viernes.
El encierro que se espera recibir y ser aprobado en su caso es de Bernaldo de Quiroz.
GPE