El campeón welter, Kamaru Usman, exigió respeto para su nombre y lo respaldó con una de las victorias más sólidas de su carrera al noquear al retador brasileño Gilbert Burns en el estelar de UFC 258.
El combate, celebrado en el UFC Apex de Las Vegas llegó después de muchos meses de espera, pues los excompañeros de gimnasio en Sanford MMA, tuvieron que separarse desde el primer semestre del 2020, cuando su pelea se agendó por primera vez.
Luego de la baja de Burns en Julio y la de Usman en Diciembre, al fin se enfrentaron y dejaron atrás a amistad. El brasileño conectó temprano en el primer round con un gancho a Usman que tomó varios segundos en recuperarse. Burns pasó una buena parte del primer episodio con la espalda en el suelo, esperando a un intento de sumisión, pero el monarca no mordió el anzuelo.
Aunque fue superado por poco en el primer round, Usman ajustó en el segundo, cambió de guardia y comenzó a pegar con el jab de izquierda y hacer mucho daño. Lo sacudió y lo mandó a la lona sin perder la compostura, pues guardó respeto por el volado de derecha que el brasileño seguía lanzando.
La campana lo salvó en el segundo, pero poco iba a cambiar, en los segundos iniciales lo volvió a mandar al suelo y conectó cuando estaba en el suelo ante la mirada del réferi Herb Dean que tardó unos instantes, pero terminó deteniendo el combate.
Usman aseguró que tiene una cuenta pendiente con Jorge Masvidal, a quien enfrentó en julio pasado y venció por decisión, aunque ambos aceptaron la pelea con una semana de aviso.