La mala leche y los alegatos quedaron atrás, Yair ‘Pantera’ Rodríguez derrotó de forma convincente a Jeremy Stephens en UFC Boston, para dejar atrás uno de los episodios más controversiales de su carrera.
Luego del piquete de ojo que detuvo la contienda con tan solo 15 segundos en la arena Ciudad de México el pasado Ciudad de México, ambos peleadores llegaron hasta las agresiones físicas y verbales antes de que la promotora los agendara para la función del TD Garden la noche del viernes, donde el hijo de Hidalgo del Parral, Chihuahua, salió victorioso pues los tres jueces lo vieron ganar 29-28.
Desde el primer segundo Rodríguez fue por la cabeza de Stephens, una patada alta como las acostumbradas y luego comenzó a buscar el cuerpo. Jeremy, quien también portó los colores de México en su calzoncillo.
Los primeros cinco minutos fueron de Rodríguez, mayor daño y mayor volumen, con su versatilidad acostumbrada y una buena defensa de derribo, pues por más que su oponente trató de tomar los ganchos y el candado al cuerpo para derribarlo, no tuvo éxito. La actitud del que aseguró que “si no muere no cuenta”, estaba muy lejos de lo hablado en las ruedas de prensa.
En el segundo round, Yair conectó una patada de izquierda al cuerpo del estadunidense y lo barrió para llevarlo a la lona. Siguió son una serie de golpes de martillo a la cabeza de Stephens, más de 50 pero el réferi Kevin McDonald consideró que seguía defendiéndose a pesar de la insistencia del chihuahuense.
No terminó de milagro
Para el tercero, ‘Pantera’ trató de chocar guantes, pero Stephen se rehusó. Durante el primer minuto logró tomar la pierna del mexicano y lo derribó para tener el control de la posición en el resto del round sin hacer suficiente daño. Conectó algunos codos, pero Yair no dejó de contestar con las manos.
Fue suficiente para que se quedara con el tercer round, pero parecía imposible revertir una tarjeta donde los jueces podrían haber dado hasta un 10-8 en el segundo round debido al volumen de golpes del ganador de la primera temporada de The Ultimate Fighter Latinoamérica y así, Rodríguez salió con el puño en alto.
La rivalidad llegó a su fin pues ambos peleadores se abrazaron en el octágono al terminar la contienda y aunque el equipo de Stephens no salió satisfecho con la decisión, se fueron tranquilos rumbo a los vestidores.
SFRM