Alexa Moreno salió con mucha seriedad a la presentación de la final de salto de caballo. Sabía que era su momento, que estaba cerca del sueño de conseguir una medalla olímpica, y tras la ejecución de sus dos saltos, se sentó y explotó su sonrisa.
Lo hizo bien, se sintió segura, quizá en la caída no tuvo el control que hubiera querido, y al final concluyó con cuarta, y pone su nombre en la historia de la gimnasia al ser la mejor ubicada en unos Juegos Olímpicos.
“No sé qué decir”, señaló Alexa Moreno después de quedar en cuarto lugar. Enseguida sonrió, como suele hacerlo, con la tranquilidad de haber dado su mejor esfuerzo, aunque también con el sabor amargo de quedarse tan cerca de una medalla.
Ante la insistencia de ello, señaló que “es el puesto más alto al que hemos llegado en varonil y femenil. Eso hace que nuestro país suene un poco más y se vea que sí practicamos gimnasia”.
La mexicana obtuvo 14.766 puntos en su primera evaluación, con un total de 14.716. Alexa realizó los dos saltos que la han llevado a acumular otros triunfos y que ha perfeccionado a lo largo de los últimos meses, con un 5.6 y 5.8 grados de dificultad.
Admitió que “sí fue una competencia dura, fue una muy buena posición, y mejoré la calificación del clasificatorio, que sabía que podía hacerlo”.
El primer lugar lo obtuvo la brasileña Rebeca Andrade (15.083), la plata la consiguió la estadounidense Mykayla Skinner (14.916), mientras que el bronce se lo quedó Seojeog Yeo, de Corea del Sur (14.733). Fueron 17 milésimas las que separaron a Alexa del podio.
Jade Carey, de Estados Unidos, que era la gran favorita para llevarse el oro, no logró hacer un buen salto, sobre todo en la caída, por lo que terminó con 12.416 y fue octavo lugar.
Así se sintió en la Final
Alexa relató cómo vivió la competencia, pues ella fue la segunda gimnasta en realizar sus saltos. “Es un poco agobiante ver cómo suben y suben. Uno no le desea el mal a nadie, pero en una Final todo puede pasar. Hice mi trabajo, lo saltos como se deben hacer”.
Moreno detalló que quizá pudo haber cambiado su rutina, con un grado de dificultad mayor, pero esos, al final le ha dado resultados. Ella ha manejado 5.6 y 5.8 grados, y por eso dice “para nada estoy arrepentida de mi competencia”.
La alegría de la gimnasta llama la atención de muchos, así como su seguridad, y a veces, su falta de palabras para responder cuando alguien le alude su trabajo. En ese instante, ella vuelve a sonreír.
“Estoy muy agradecida de haber tenido esta oportunidad y llegar a una Final. Nosotros hacemos mucho esfuerzo y trabajo, pero también representamos a nuestra bandera y lo hacemos de la mejor manera.
Lo que sigue es el descanso. “Ha sido el ciclo más largo del mundo, quiero terminar mi carrera. Empezando el año veo”.
Se ganó su lugar en la historia
Moreno se convirtió en la segunda mexicana en llegar a una Final en la especialidad. La primera fue Denisse López en Sídney 2000, y concluyó en la séptima posición.
Llegó a la Final en el octavo lugar, tras ejecutar una rutina en la que utilizó un tema musical de uno de los animes más exitosos de los últimos tiempos, Demon Slayer: Kimetsu no Yaiba, con una calificación de 14.633. La mexicalense ha declarado en varias ocasiones que le gusta mucho la cultura japonesa, en especial, los animes, así que aprovechó la oportunidad.
Ha ganado bronce en el Campeonato Mundial de Doha 2018, oro en la Copa Toyota 2018, así como bronce en la Copa del Mundo de Bakú y en la Copa Jeju, ambas en 2019.