Reutiliza
- Evita los productos desechables. Elige aquellos que se puedan utilizar varias veces como los recipientes de vidrio.
- Dona juguetes. Si tus hijos descartaron juguetes, no los botes. Lávalos y dónalos para que tengan una segunda vida
Dile adiós a las botellas de plástico. Sustitúyelas por las de acero inoxidable, que además son más higiénicas.
Reduce
- Reutiliza los envases de vidrio. Puedes convertirlos en floreros, centros de mesa, lámparas con luces pequeñas, portavelas o lo que se te ocurra.
- Repara los electrodomésticos. Así no tendrás que comprar nuevos. Si la avería no tiene solución, adquiere uno con etiqueta verde de bajo consumo energético.
- Separa bien. Ten contenedores o bolsas en tu casa para separar el vidrio, periódico y cartón, latas y plástico. Antes de depositar cualquier objeto en su lugar, lávalo bien a fin de evitar malos olores.
- El papel. Pueden reciclarse revistas, volantes, cuadernos, agendas, bolsas de papel, etcétera. Deben estar limpios y secos. Este rubro no incluye servilletas ni papel higiénico.
- No tires aceite sucio al fregadero. Un litro contamina hasta mil litros de agua. Para eliminarlo, espera que se enfríe y viértelo en una botella. No lo combines con ningún otro producto. Cuando esté llena, tírala a la basura o llévala a un lugar especial de reciclaje.
Recicla
- Transforma la ropa. Esos jeans que ya no usas, quizás puedan convertirse en un edredón, bolsa, cojín o delantal.
- Con especialistas. Guarda las baterías que ya no tengan carga y llévalas a un punto de reciclaje. Son extracontaminantes.
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