La fuerza está en el trabajo. A grandes rasgos, son tres los desafíos que plantea el nearshoring a las regiones gerográficas que lo reciben y uno de los más importantes es atender la demanda de mano de obra calificada, lo que requiere que las empresas brinden capacitación continua a sus empleados, señala Roberto Durán, investigador y profesor en la Escuela de Gobierno y Transformación Pública del Tec de Monterrey.
Es necesario comprender a fondo el fenómeno del nearshoring para aprovechar sus beneficios, agrega el catedrático, pues “no se trata de una oportunidad generalizada para todo el país, sino más bien de un impulso que beneficia a ciertos sectores, industrias y modelos de negocio”, así como a determinadas regiones geográficas.
Aunque México ha recibido un buen flujo de inversiones por al menos tres décadas, en los últimos dos años “se está convirtiendo en una plataforma de exportación interesante, para sustituir a China en la cadena de valor norteamericana”, explica Durán.
En medio de este crecimiento, que insta a empresas y ciudades a acelerar sus planes para aprovechar las nuevas inversiones, se destaca la necesidad crucial de invertir en la capacitación de la fuerza laboral mexicana, donde al cierre de 2023 69 por ciento de los empleadores reportaron haber tenido problemas para encontrar talento, cuando el promedio de los últimos diez años fue de 54 por ciento, en sectores de tecnologías, manufactura, automotriz, transporte y logística, según una encuesta elaborada por Manpower Group.
Trabajar en conjunto
Las empresas demandan competencias específicas que actualmente México no puede solventar, entre ellas formaciones técnicas, habilidades digitales y habilidades blandas.
Para superar estas deficiencias, se requiere un enfoque estratégico en la capacitación y el desarrollo de programas específicos en colaboración de universidades y el sector privado.
“Las empresas demandan hoy competencias y habilidades específicas donde México tiene claros déficits. Estas incluyen formaciones técnicas, habilidades para la industria en evolución y habilidades blandas como liderazgo y comunicación en inglés. Además, de la necesidad de medir la calibración de competencias entre la fuerza laboral de manera cuantitativa y cualitativa”, dice Roberto Durán.
Para reducir la brecha de habilidades entre trabajadores experimentados y nuevos empleados, Durán enfatiza la importancia de implementar programas de capacitación, alianzas entre universidades y empresas, y la creación de iniciativas específicas para abordar las demandas del mercado.
Microcompetencias y modelos digitales
Un enfoque innovador es la implementación de microcompetencias, certificaciones y programas de capacitación focalizados en habilidades específicas. Además, la incorporación de modelos de enseñanza digital, combinando enseñanza híbrida y remota, se presenta como una solución efectiva para llegar a una fuerza laboral diversa y dinámica.
El tema de la cultura y liderazgo también se aborda, reconociendo que son fundamentales para el sentido de pertenencia del personal y el crecimiento de las empresas. Durán destaca iniciativas como las microcompetencias y modelos de enseñanza digital como alternativas para desarrollar habilidades específicas de manera eficiente.
No obstante, “si bien aprovechar el nearshoring es una oportunidad valiosa, no puede considerarse una panacea para resolver los problemas estructurales del país; se deben cuidar las prioridades gubernamentales, hacer alianzas entre el sector público y privado, y garantizar que los recursos se asignen estratégicamente para impulsar el desarrollo sostenible en múltiples áreas, incluida la educación”, finaliza Roberto Durán.
DJR