Uno de los grandes clásicos de la moda masculina que se descartará en el constante tobogán de la City de Londres de business smart (ropa de negocios y casual) a business casual (ropa formal pero sin saco de vestir) es el traje azul marino a rayas.
“No tengo un traje a rayas y no puedo decir que compraré uno pronto”, dice Rupert Gove, un analista de la ciudad de 29 años. Él y sus compañeros de oficina prefieren algo mucho más relajado ahora que los códigos de vestimenta se han aligerado —un chaleco de lana Patagonia sobre un traje formal y corbata—, y cuando la realidad cotidiana de la vida en la oficina implica a menudo “ajustar hojas de cálculo Excel y unirse a llamadas en video”.
Lo cual es en muchos sentidos una pena. “Rebosante de intemporal elegancia británica”, en palabras del legendario sastre de Savile Row, Edward Sexton, que sabe una o dos cosas sobre las telas a rayas, que cortó trajes para todos, desde The Beatles hasta George Soros, el estilo de estos conjuntos es profundamente halagador. Una franja estrecha de bajo contraste enfatiza la línea desde el pecho hasta la cintura, que alarga y adelgaza el cuerpo al tiempo que agrega un sentido sutil de formalidad de negocios.
Pero fuera de la Square Mile —o la City, como se conoce al barrio más exclusivo del centro de Londres—, el traje a rayas está encontrando una nueva vida. En París, el director creativo Hedi Slimane asaltó en primavera las pasarelas para caballeros con Celine, un espectáculo dolorosamente genial, con un traje a rayas de tres piezas cuajado en cristales, evocando toda la pomposidad del Savile Row de un joven Mick Jagger siendo ya un rockstar en los años 70. (Un look que debe abordarse con cautela, a menos que, por supuesto, puedas reunir toda la arrogancia de un dios del rock sobrenaturalmente joven).
Tom Ford también levantó la cabeza hacia los años 70 para la primavera, cortando sus trajes grises a rayas con solapas anchas, combinados con camisas y corbatas de seda vidriada. En Alexander McQueen, Sarah Burton ha cortado tela de múltiples rayas en sastrería rasurada; y Kris Van Assche ha agregado rayas destacadas a su mezcla de estampados salpicados de pintura y brillos deportivos de neón para Berluti.
“Se trata de subvertir los códigos tradicionales de ropa masculina para luego interpretarlos y darles una nueva dirección”, dice Lane Crawford, director de comercialización de Nelson Mui. Si bien los trajes a rayas tradicionales no siempre se han vendido bien en los grandes almacenes multinacionales, Mui ha visto un aumento en la demanda de trajes por pieza, chaquetas a medida suaves, no construidas, y camisas casuales, incluidas las de Dries Van Noten, 3.1 Phillip Lim y Uma Wang. Y para que la tela a rayas parezca más contemporánea, recomienda cambiar la silueta, un pantalón más corto con una camisa polo y una zapatilla de deporte simple, o combinarlo con piezas inesperadas, como botas.
Para los diseñadores, las telas a rayas agregan un toque de formalidad y elegancia a la ropa deportiva y las prendas informales. “Siento que puedo recuperar las telas tradicionales si agrego algo nuevo”, dice Van Assche, de Berluti. Haciendo eco de las tendencias de la moda urbana, hizo que el icónico diseño Scritto de Berluti se entrelazara con las telas a rayas de seda y lana de las pasarelas de primavera para darle una dimensión adicional.
“En esta nueva era de sastrería, las telas a rayas ahora son populares más allá del entorno corporativo porque vuelven a dar un mayor sentido de estilo y masculinidad”, dice Van Assche.
Craig Green es otro diseñador que juega con esa noción de tradición, mezclando la clásica raya de los trajes otrora formales en lo que él describe como “formas y prendas de utilidad en estilo trabajador”.
Los resultados que obtuvo son cualquier cosa menos corporativos. Para la primavera reciente, Green imprimió líneas de puntadas de rayas finas en algodón con textura de papel, para crear con esos lienzos prendas de vestir exteriores a partir de múltiples capas de organza, hechas de retazos con bordados de rayas que tienen la tarea de mantener juntas las capas.
Pero el cambio en los gustos, usos y costumbres de los londinenses no ha atenuado el amor del famoso diseñador Edward Sexton por esta tela de negocios. “Personalmente, me encanta usar un traje a rayas con una camisa con cuello de etiqueta, tanto como me gusta vestirlo en invierno con un suéter de cuello alto o de vuelta. También tiendo a usar un traje a rayas para las reuniones formales”, agrega. “Pero entonces soy bastante tradicional acerca de estas cosas”.
srgs