A veces, las madrespasan el día corriendo de un lado a otro para atender las necesidades de los hijos y la familia, dejando poco tiempo para dedicarse a ellas mismas, pero, afortunadamente, quienes tienen hijos son cada vez más conscientes de que son un pilar fundamental yque también requieren dedicarse tiempo a ellas mismas.
Con el objetivo de lograr un equilibrio en los diferentes aspectos de su vida, las madres de hoy buscan espaciospara desarrollarse, ejercitarse, aprender, trabajar y, por supuesto, cuidar su salud, alimentación y bienestar general.
Por ello, Ana María González, nutrióloga certificada por el Colegio Mexicano de Nutriólogos y madre de familia, te invita a seguir los siguientes consejos para mantenerte saludable, en forma y rendir al cien como mamá sin descuidarte a ti misma.
1. Forma hábitos
Para lograr ser constantes en cualquier situación es necesario crear hábitos. Con la ayuda de una rutina integrada por horarios establecidos será más sencillo, para ti y para tus hijos, tener una estructura que contemple comidas, ejercicio, tareas y otras actividades diarias.Prepara un calendario en conjunto con tu familia y recuerda establecer metas fáciles de visualizar (y cumplir).
2. Ejercítate
Sin duda realizar ejercicio tiene muchos beneficios para la salud, pero también nos permite mejorar nuestro estado de ánimo y es un gran momento terapéutico para desahogar el estrés acumulado. Si de plano no tienes tiempo de ir a un gimnasio, hoy en día nos podemos apoyar de la tecnología. Existen varias aplicaciones para celulares inteligentes en donde puedes tener una rutina que se ajuste a tu tiempo y necesidades y que puedes realizar en cualquier momento del día. ¡Busca la que más te convenga, y empieza a ejercitarte hoy mismo!
3. Aliméntate y aliméntalos sanamente
Los beneficios de la buena alimentación son innumerables. Comer adecuadamente se reflejará en tu estado de salud y el de tu familia, disminuyendo el riesgo de enfermedades y fomentando buenos hábitos a largo plazo. Prioriza el consumo de verduras y frutas (por lo menos 5 porciones cada día), prefiere alimentos ricos en proteína que contengan poca grasa como leguminosas, cortes magros, carnes blancas ylácteos descremados; los cereales integrales y las bebidas bajas en calorías o sin azúcares añadidos.
4. Planifica las comidas
Si planeas un menú al inicio de la semana, podrás establecer un presupuesto para tus compras, minimizar los antojos y facilitar que tú y tu familia lleven una alimentación saludable. Te recomendamos hacer el menú en familia y dejar que cada uno escoja por lo menos un platillo a la semana.
5. Pasa tiempo en familia
Además de nutrir nuestro cuerpo, el tiempo que pasamos en familia es un gran alimento para el alma. Aún cuando pases mucho tiempo fuera de casa, trabajando u ocupándote de diferentes actividades, procura propiciar cenas u otros momentos familiares, sin celulares o distractores como la televisión, para generar oportunidades de estrechar lazos y acercarte a la familia. La práctica de ejercicio en familia es un gran momento para establecer y fortalecer los lazos familiares.
6. Duerme bien
Uno de los mayores retospara las mamás es, sin duda, dormir bien. La recomendación general de sueño es de seis a ocho horas diarias; pero si algo les hace falta a las mamás son horas en el día y, lamentablemente, lo que más sacrifican es el sueño. Sin embargo, la pérdida de sueño puede ocasionar malos hábitos de alimentación, fatiga y estrés, entre otros efectos secundarios.Organizar tu día te ayudará a no quitarle prioridad al tiempo del sueño y descanso.
7. Reparte las tareas del hogar
Cada vez es más común que las tareas del hogar se repartan entre los miembros de la familia. Haz un plan semanal de actividades de las que será responsable cada miembro de tu familia de acuerdo a su edad y tiempo disponible. Esto, te ayudará a evitar repartir y disminuir el estrés y permitirá que tus hijos adquieran nuevas habilidades, aprendan a trabajar en equipo y se hagan más responsablesal colaborar en las tareas del hogar.
8. Reserva tiempo para ti misma
Es muy importante dedicarte un tiempo, ya sea para realizar tu rutina de ejercicio, leer un buen libro,asistir a una clase, beber un té, salir con amigas, tomar una siesta o, simplemente, un respiro. Estos momentos te permitirán recargar pilas para hacer todas tus labores de la mejor manera. Recuerda anotar en tu plan diario un tiempo para ti, para que no lo dejes de lado.
Mantente actualizada y busca consejos sobre alimentación, recetas, rutinas y actividades con la familia y para trabajar en tu propio bienestar; pero sobre todo hazlo siempre de la mano de especialistas calificados, ya que tu salud y la de tu familia es lo mas importante.
¡Recuerda que será más fácil cuidar a tu familia si lo haces primero contigo misma!
Tu hijo, tu reflejo
Diferentes investigaciones han confirmado la importancia de que los padres sigan hábitos saludables que puedan heredar y transmitir a sus hijos, ya que el ejemplo es uno de los mejores métodos de enseñanza.
Un estudio reciente de la Universidad de Leeds reveló que comer en familia, aunque sea solo dos veces por semana, ayuda a aumentar la ingesta diaria de frutas y verduras en los niños, quienes observan la forma en que comen sus padres y los diferentes tipos de alimentos que consumen,para crear sus propios hábitos y preferencias alimentarias.
De igual forma, un estudio de la escuela de salud pública TH Chan de la Universidad de Harvard, asegura que los niños y adolescentes cuyas madres siguen hábitos saludables como llevar una dieta equilibrada, hacer ejercicio con regularidad, mantener un peso recomendable, no fumar y beber alcohol con moderación, son 75% menos propensos a tener problemas con su peso en comparación con los niños de mujeres que no tienen un estilo de vida saludable.