La industria turística en México se reinventa cada día. A pesar de la crisis generada por el covid-19, han surgido historias de éxito de la mano de emprendedores responsables, enfocados en modelos de negocios que no dañan los ecosistemas, fomentan el turismo comunitario y social e impulsan los viajes con causa.
“Antes de la pandemia ya existían empresas preocupadas por transformar el turismo tradicional de forma que impactara positivamente en los ecosistemas, personas y culturas; pero hoy más que nunca un nuevo modelo de turismo es fundamental para impulsar la prosperidad del país”, comenta Raúl de Anda, CEO y cofundador de Unreasonable México, aceleradora de negocios que desde hace siete años apoya emprendimientos de diversos sectores, incluido el turístico, para “convertir lo ilógico en rentable”.
En ocho años, Raúl ha apoyado más de 300 emprendimientos con causa —92% de los cuales siguen activos— y ha ganado reconocimientos internacionales como el 16 Gamechangers (2016) de Redbull y Elon Musk; o ser reconocido entre los 100 mexicanos más inspiradores en el libro Those Who Inspire, en 2018.
Estos emprendimientos “jalan al turismo internacional mientras detonan el nacional, focalizándose en las zonas rojas de pobreza extrema, para que los viajeros derramen ingresos donde más impacto van a tener”, explica De Anda.
El éxito no surge solo de la idea de crear una nueva experiencia de viaje, agrega, sino también “del cambio en el comportamiento de la gente, que cada vez más busca experiencias originales, auténticas, diferentes a las comunes, para ayudar y además compartirlas en instagram”.
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Pioneros del ecoturismo
Con 26 años en el mercado turístico, Expediciones Sierra Norte de Oaxaca (ESNO) es una agencia de turismo que opera excursiones de aventura con los seis proyectos ecoturísticos comunitarios de los Pueblos Mancomunados de Oaxaca.
Su característica principal es impulsar un turismo responsable, sin vulnerar los ecosistemas de la zona, con opciones como avistamiento de aves, campamentos, rappel, senderismo, tirolesas y ciclismo, explica Angelina Martínez, coordinadora general de la empresa.
Para los fundadores de ESNO el mayor reto fue “arrancar un proyecto ecoturístico, cuando el ecoturismo todavía no se desarrollaba en México. No había otros modelos de turismo comunitario con los cuales guiarse. A esto se han ido sumando los retos que el mismo crecimiento demanda, como entrar a la venta en línea con una plataforma propia y diversificar productos”, dice Martínez.
La empresa ha ganado varios premios internacionales por su modelo, que pulió con el apoyo de Unreasonable México y con el que hace del turismo una alternativa de desarrollo para la región. En la actualidad genera empleos para tres grupos vulnerables: los jóvenes, que ya no migran a Estados Unidos; las mujeres, como guías y líderes de proyecto, y los adultos mayores, que diseñan nuevas rutas y experiencias. Aquí sus logros.
- 20,000 turistas anuales los visitaban antes de la pandemia.
- 12 comunidades trabajan con ellos.
- 400 personas beneficiadas.
El poder del arte
Mediante la cultura, el arte y la innovación social Tierra de Artistas desarrolla soluciones que impulsen el desarrollo económico de comunidades en Yucatán, Quintana Roo, Puebla, Chiapas, Oaxaca y Baja California Norte, así como en la Amazonia Peruana, Kenia y Marruecos, cuentan Frida Hazz, fundadora y coordinadora general, y Daniela Abella, coordinadora general de la empresa, acelerada por Unreasonable México.
El principal reto de Tierra de Artists, cuentan, fue encontrar un modelo para cumplir con el objetivo de tener un impacto en las comunidades vulnerables y al mismo tiempo lograr un efecto en quienes viajan con nosotros. “Una vez que encontramos el modelo de emprendimiento social, todo fluyó”.
Y luego llegó la pandemia. “Fue una gran barrera porque no podíamos movernos, ir a las comunidades a visitarlos, a hacer los proyectos. Entonces en un pizarrón gigante escribimos: ¿Y ahora, cómo vamos a seguir ayudando a las comunidades y a nuestros amigos artesanos desde nuestra casa?”.
En ese punto, la digitalización fue la clave. “Ellos comenzaron a compartir su talento desde su taller, a través de plataformas diversas como zoom. Los artesanos se conectaban con un grupo de jóvenes que querían aprender, por ejemplo, a pintar un alebrije y les explicaban el paso a paso para hacerlo”.
Esto reactivó la economía de esas comunidades que dejaron de vender sus artesanías al turismo. “El arte es la base de todo. Nos ayuda a generar confianza”, y para las comunidades es la puerta para abordar y solucionar diversas problemáticas. Sus cifras:
- 160 proyectos implementados en 10 años.
- 3,000 voluntarios han participado.
- 10,000 pequeños productores han sido beneficiados.
La Mano del Mono
Fundada en Chiapas en 2009, La mano del mono ejerce el ecoturismo con el objetivo de cambiar las malas prácticas de los turistas al viajar y con ello evitar daños a los paisajes naturales y afectaciones al desarrollo de las comunidades de los lugares que visitan.
En cuanto al apoyo a las comunidades rurales donde desarrollan sus actividades, La mano del mono busca que la mayoría de sus proveedores sean empresa desarrolladas por los mismos pobladores, y mediante el modelo Market Ready (sistema que ayuda a empresas a ofrecer viajes y experiencias competitivas y sostenibles) han capacitado a más de 350 empresas sociales en 20 destinos.
Con estas acciones han impactado directamente a más de 3,500 personas e indirectamente a más de 4,500 familias rurales e indígenas para que el turismo de naturaleza y aventura contribuya a la conservación de áreas naturales protegidas y al bienestar social de la zona.
A nivel internacional La Mano del Mono ha facilitado proyectos en 10 países. Entre sus logros, cuentan:
- 3 áreas naturales protegidas salvaguardan con su trabajo.
- 8% de aumento en ingresos para las comunidades.
- 135 emp.resas fortalecidas.
- 2,750 personas capacitadas y aliadas a la conservación.
- 80 empleos generados por día.
Ruta Origen
Dedicada a impulsar el desarrollo comunitario a través de experiencias de turismo sostenible, Ruta Origen busca conectar a los viajeros que los contratan con la identidad de los destinos que visitan.
Las experiencias de turismo sostenible son operadas por guías especializados, anfitriones locales y personas que habitan los destinos, coordinación de esfuerzos que genera fuentes de ingresos económicos alternativos para productores y aliados en el campo y la ciudad.
Con base en su esquema de trabajo, más de 60% de los ingresos se queda en el destino turístico y en la red de aliados con quienes interactúan. Además, trabajan con base en los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU. Sus cifras:
- 600 viajeros y clientes.
- Seis sistemas productivos.
- 160 personas beneficiadas.
Rutopía
Certificada por B Corp, en sus políticas y operación de desarrollo social y ambiental, Rutopía ofrece experiencias de viaje en todo México “únicas y 100% a la medida”, e impulsa a comunidades indígenas de los lugares que visita para que se conviertan en proveedores exitosos de dichos planes turísticos personalizados.
Rutopía ofrece opciones de alojamiento y actividades excepcionales, tanto a lugares conocidos como a sitios escondidos, para que sus clientes se relajen y disfruten en todo momento de su estancia, para lo cual cuidan todos los detalles y ofrecen asistencia las 24 horas del día.
Rutopía trabaja en alianza con diferentes plataformas online de viajes, para armar planes de viaje sin contratiempos.
- 30 experiencias de viaje.
- 136 beneficiarios.
- 12 grupos de trabajo.
gaf