Este día es aniversario del fallecimiento el cantante tamaulipeco Rigo Tovar, lo cual se recuerda en su tierra natal Matamoros por la sociedad civil y empresarial, ante el legado artístico que puso a la ciudad fronteriza en el mapa nacional y hasta internacional.
El compositor de canciones como “El Sirenito”, “Mi amiga, mi esposa, mi amante”, “Lamento de Amor”, “Carita de Ángel”, entre otros, califica el presidente de la Fecanaco Julio Almanza Armas, se ganó el reconocimiento como “un digno homenaje a la labor y esfuerzo hechos por “Rigo”, lo cual generó crear un patronato quien de manera permanente, promueve su contribución para mantener vivo su legado”.
Es precisamente el empresario que mostró una foto de sus últimos días de "El sirenito".
Fue durante los festejos en Matamoros a Rigo Tovar, un 20 de marzo de 2005, (hace 16 años), siendo Almanza Armas titular de la Canaco local, cuando acompañado por el editor y periodista Julio Alberto Rubio, acudieron a visitar al cantante en la habitación del Hospital Santa Coleta, en la ahora CdMx. Días más tarde, un 27 de marzo, dejaría de existir.
En la plática encontraron a un Rigo convaleciente, les brindó lo que sería la última fotografía y entrevista en vida. Además, con semblante contento, recordó su amor por Matamoros, expresó que no podía dejar de quererlo y anhelaba volver a su ciudad y construir una casa en la “playa”.
Cabe señalar que en esa ocasión, el creador de una mezcla musical entre la cumbia, la balada, el bolero y la música norteña, recibió el que sería también el último reconocimiento en vida por parte de los comerciantes de la ciudad.
ICGC/EVT