Laguneros que se dieron cita la noche del sábado al Coliseo Centenario de Torreón, lograron perderse en el amor, al presenciar un concierto mágico lleno de romanticismo a cargo del dueto Air Supply, en el que hicieron un recorrido por los más grandes éxitos que han mantenido a los músicos vigentes y en el gusto de varias generaciones.
Al lugar comenzaron a arribar desde temprana hora los fans más entregados de los famosos artistas, ya que esperaron varios años para reencontrarse con ellos.
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Personas de ambos sexos y de todas las edades desfilaban por el recinto para ocupar sus respectivos lugares sin contratiempos, mientras tanto, algunos aprovechaban para comprarse algún souvenir de la banda.
Fan los conoce; es admiradora gracias a sus papás
Marifer es una chica lagunera de 23 años de edad, quien logró ser ganadora de una dinámica que organizó Coliseo y esperaba emocionada entrar al camerino de los artistas, con quienes se tomaría una foto y además pediría que le autografiaran dos boletos con los que sus papás entraron al concierto que ofrecieron en el 2006 en un teatro de la ciudad, ya que gracias a sus progenitores se convirtió en fan número uno.
El tiempo transcurría, y justo cuando el reloj marcaba las 21:30 horas y ante un recinto abarrotado, se hizo un silencio para anunciar al grupo australiano, y ante gritos y aplausos que retumbaron el lugar, aparecieron Graham Russell y Russell Hitchcock, luciendo modernos atuendos, el primero de ellos, acompañado de su inseparable guitarra.
Inmediatamente arrancaron con un toque dulce al interpretar el éxito, ‘Sweet dreams’, enseguida uno de sus más grandes éxitos, ‘Even the nights are better’, la cual cantaron todos de principio a fin.
Siguieron con "Just as I am", "Every woman in the world" y posteriormente expresaron: "Bienvenido Torreón, gracias por estar aquí, es un placer", saludó Russell en el idioma de Shakespeare.
"Buenas noches Torreón, es un gusto estar aquí con ustedes, está noche somos suyos", expresó Graham, quien demostró que no está peleado con el español.
Los gritos no se hicieron esperar y enseguida los deleitaron con "Chances", "Goodbye", "I can wait forever".
En un break Graham presentó a los músicos y dijo sentirse muy joven con su público presente, a quien brindó unas palabras en estilo poema, donde manifestó que las cosas más importantes en su vida son la música y su familia, y a su público, dijo llevarlo siempre en su mente y en su corazón.
La ovación no se hizo esperar, mientras los complacía solo en el escenario con "Discombhuts".
Posteriormente regresó Rusell para interpretar "Two less lonely" y "The one that you love", con las que los músicos llenos de energía los pusieron a cantarlas a capella.
Siguieron con "Lost in love", y al concluirla dijo Rusell, "un abrazo para todos México, sean felices, ¡viva!", inmediatamente su público le correspondió con aplausos.
Los intérpretes se respaldaron con cuatro músicos en el concierto que le dieron ese sonido de rock clásico a más éxitos como "Making love out of nothing at all".
La noche se tornaba más divertida y mágica, ya que los músicos en todo momento interactuaron con su fiel público.
Se aproximaba el final y los artistas se ausentaron del escenario, mientras sus fans pedían más melodías.
Para complacerlos regresaron para deleitarlos con unas declaraciones de amor a través de "Without you" y "All out of love", con las que aprovecharon sus fans para encender sus celulares y ellos, dieron fin a su actuación a las 23:09 horas.
Todos sin excepción se dejaron llevar por sus canciones románticas que los hicieron suspirar en este encuentro íntimo, en el que no solo interpretaron sus éxitos, sino también compartieron sus experiencias en un inolvidable concierto, que congregó a tres generaciones, jóvenes, adultos y personas mayores.
aarp