En el marco del Festival Revueltas de Durango, la noche de este domingo se presentó en la explanada de la presidencia municipal de Gómez Palacio, el cantante y autor argentino, Alberto Cortez.
Logró gran convocatoria. Sentado al lado de un piano con su respectivo músico, Cortez comenzó interpretando "Distancia". Su interacción con el público fue cordial y cercana, platicando con todos, como si fuera con uno solo.
En el público, la gente respondía, comentaban entre todos lo que platicaba el cantante, ya de 76 años, quien no obstante aún conserva su peculiar estilo interpretativo.
A Cortez se le ha llamado "El gran canta autor de las cosas simples". Sus canciones remiten hechos que pudo haber vivido usted, el vecino, alguien muy cercano.
Tal vez por ese motivo el éxito lo ha seguido, porque habla de lo que sabemos, sin que sepamos que es posible decirlo así.[OBJECT]
Una de las canciones más cantadas a coro por los presentes, fue la de "Mi árbol y yo". Cortez ha sido galardonado en múltiples ocasiones y como olvidar los espectáculos que montaba con quien fuera su gran amigo, Facundo Cabral, aquel de "Lo Cortez no quita lo Cabral".
Más de 40 álbumes editados desde el año 1960, compilan su música. Cortez siguió el concierto de esta noche dominical con "Callejero", conmovedora canción dedicada justo a los perros que viven en la calle.
Además, cantó otras melodías que lo han encumbrado, como la clásica "No soy de aquí ni soy de allá". Cabe destacar la excelente interpretación del pianista que lo acompañaba.
El concierto fue rico en matices, en recuerdos y en compañías. Nadie quería que se fuera, pero una de las últimas canciones con las que engalanó el escenario sencillo y frugal, fue "Cuando un amigo se va".
Cabe mencionar que en el llamado Paseo Independencia, se colocaron las food trucks, en un ambiente cordial y grato, los asistentes se retiraron de la explanada de presidencia; algunos consumieron en las camionetas. Todos se fueron con sonrisas y plática.
JFR