Alejandro González Iñárritu regresa a México para dar inicio al rodaje de su próxima película Limbo, la cual marca su regreso al país después de dos décadas de trabajo en Hollywood. Las calles del centro histórico son la locación que ambientará la nueva historia del director, ganador del premio Oscar.
El rodaje de Limbo arrancó esta semana en las calles circundantes a Francisco I. Madero, donde se dieron cita decenas de extras que, como parte de la escena, aparecen recostados sobre el suelo y luciendo todo tipo de atuendos.
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El trabajo previo para estas escenas comenzó esta misma semana, cuando el cineasta realizó un scouting en compañía de Eugenio Caballero, el director de arte que ha participado en otras cintas como Roma y El laberinto del Fauno.
El regreso del director de Amores Perros estaba previsto para el mes pasado, pero la pandemia de covid-19 impidió que avanzara en su nuevo proyecto. Ahora tomó las calles de la ciudad con los debidos protocolos sanitarios para proteger a su equipo.
Aunque la información sobre la historia se mantiene en total hermetismo, el año pasado Iñárritu enfatizó su deseo por volver a filmar en México, esto durante una charla con medios de comunicación por al relanzamiento de Amores perros.
“Está en mis deseos, es mi intención y sucederá pronto, éste es un buen momento para regresar a mi origen, porque salí de México a los 37 años, no estaba tan pequeño, así que esta visita sucederá pronto”, dijo en ese entonces.
Entre el elenco destaca Daniel Giménez Cacho, quien ha sido captado en las escenas que toman forma en la capital del país. Semanas atrás, se confirmó la participación de Luz María Zetina y Noé Hernández, entre otros talentos mexicanos.
amt