En la era de muros fronterizos, de las crisis de migración generalizada en el orbe y la falta de valores, Liset Cotera en México, Alejandra Fritis en Chile y Josep Arbiol en España impulsan plataformas cinematográficas en las que su público es uno en particular: los niños, con la clara esperanza de que encuentren en el cine la semilla que germine en ellos la necesidad de un cambio social.
Cotera es fundadora del Festival Internacional de Cine para Niños (…y no tan Niños), que cumple 23 años de existencia, en los que Liset se percató de lo fundamental de establecer conexiones entre la infancia mundial: “El cine te permite ampliar el panorama, pero sobre todo ser empático, eso promueve una ciudadanía muy especial”, aseguró a ¡hey!
La directora de La Matatena, Asociación de Cine para Niñas y Niños AC, está convencida de que a través de las imágenes se ofrece “una connotación para enseñar a los chicos a tener una alfabetización digital, el cine es una disciplina artística que enriquece el intelecto, y las niñas y los niños se reencuentran en pantalla con los pequeños de otras latitudes”, comentó.
Cotera estableció una red de colaboración con otros espacios como el Festival Internacional de Cine para Niños, Niñas y Adolescentes Ojo de pescado de Valparaíso, Chile; su directora Alejandra Fritis argumentó lo poderoso que puede ser el cine para cambiar la mentalidad de la infancia: “Lo más importante es que son las niñas y niños los que están demandando el contenido, las muestras y talleres.
Nosotros queremos cine para cambiar el mundo, porque estoy convencida que contribuye en una parte, porque los pequeños ponen sus mensajes a través de lo que ven y crean, sus temas son el cuidado al medio ambiente y animales, y quieren la paz”, dijo.
Josep Arbiol, director del Festival de Cine de Valencia para Niños, Jóvenes y Profesores, compartió las opiniones de Liset y Alejandra:
“Los festivales pueden ser la manera en que la multiculturalidad que
muestra la imagen en pantalla abra más la mentalidad, aunque estamos cada vez más cerca de una aldea global, es una lástima que perdamos nuestras culturas.
El cine es una forma de trabajar valores, si son positivos se puede trabajar cualquier problemática, no la resuelve, pero clarifica el punto de vista”, enfatizó el funcionario.
ERV