'El Padrino' es considerada una de las grandes películas clásicas del cine estadounidense y cumple 50 años este 14 de marzo. Reinventó forma de contar historias de la mafia y puso la 'vara muy alta' para todas las películas de su tipo. Esta película referente en el cine está llena de curiosidades y anécdotas. Una de ellas fue el acuerdo que un productor cerró con la mafia italiana para evitar boicots a la película.
Se cuenta que a Robert Evans, jefe de producción de Paramount, se le heló la sangre al escuchar a un hombre al otro lado del teléfono que lo amenazó para no hacer la película.
Ese fue sólo uno de los escalofriantes intentos de echar por tierra la icónica película de Francis Ford Coppola basada en la novela de Mario Puzo de 1969 sobre la familia Corleone.
Sin embargo, se dice que la mafia terminó apoyando el proyecto después de que un padrino de la vida real le hiciera al productor una oferta que no pudo rechazar.
Esto hizo que la película protagonizada por Marlon Brando y Al Pacino reflejara una autenticidad que la convirtió en un éxito colosal.
Pero vayamos por el principio. Paramount siempre quiso que 'El Padrino' fuera dirigida por un italoamericano. El elegido fue Francis Ford Coppola.
A medida que la película empezaba a tomar forma, el jefe de la familia criminal más poderosa de Nueva York comenzó a interesarse por ella.
Joseph Colombo, jefe de una de las cinco familias de la mafia en Nueva York, también fue el fundador de la Liga Italoamericana de Derechos Civiles, una organización de 45 mil miembros que se propuso mejorar la imagen de los italoamericanos.
No quería que Paramount arrojara luz sobre el tema y utilizó a la Liga para enfrentar al estudio. Al principio hubo amenazas sobre cuestiones laborales. Un ejecutor llegó a Hollywood ofreciendo a Paramount un millón de dólares para desechar el proyecto.
También se sabe trabajadores relacionados con la película amenazaron con ir a la huelga, desaparecieron misteriosamente equipos costosos y los buscadores de localizaciones en un barrio de Nueva York se encontraron con que la gente no estaba dispuesta a cooperar.
Luego llegó la siniestra llamada telefónica al jefe de producción de Paramount, Robert Evans, amenazándolo a él, a su esposa y a su bebé. Cuando las amenazas llegaron al productor Al Ruddy, no tuvo otra opción que reunirse con Colombo.
La oferta que no pudo rechazar
A principios de 1971, Ruddy aceptó con cautela una reunión con Colombo. El mafioso le entregó su "oferta": eliminar la palabra 'mafia' del guión, omitir toda referencia directa a la 'Cosa Nostra' y permitir que auténticos miembros de la mafia colaboraran en el rodaje.
Así, la palabra mafia salió y entraron algunos de los 'socios' de Colombo como extras en la película. Coppola se empeñó en ignorarlos, pero se dice que los mafiosos estaban cautivados, tomando cafés, ajustando sus corbatas y ofreciendo consejos.
Y como parte del trato, Ruddy prometió donar los beneficios del estreno a la Liga Italoamericana de Derechos Civiles de Colombo.
La 'bendición' de la mafia
A cambio, la Liga hizo un anuncio público de que 'El Padrino' se estaba filmando con la bendición de Colombo. Pero los problemas no terminaron ahí. Gulf & Western, el conglomerado propietario de Paramount, se enfureció al descubrir que un empleado estaba haciendo tratos con la mafia.
Los precios de las acciones se desplomaron y Ruddy fue despedido para ser contratado de nuevo poco después por la insistencia de Coppola, aunque la donación a la Liga se desechó discretamente. Ruddy diría más tarde: "Sin la ayuda de la Mafia, habría sido imposible hacer la película".
El estreno fue todo un éxito. 'El Padrino' superó el récord en taquillas de 'Lo que el Viento se Llevó' y en los cines la gente hacía fila durante horas para verla.
Los únicos que no tuvieron que esperar fueron los mafiosos invitados por Ruddy a una proyección especial como agradecimiento por su 'cooperación'.
¿Y qué pasó con Joseph Colombo? El hombre que 'dio su bendición' para filmar 'El Padrino' pasó los últimos siete años de su vida en coma a causa de un atentado perpetrado por Jerome A. Johnson, un hombre disfrazado de fotógrafo que le disparó en cuatro ocasiones a pocas manzanas de donde Coppola estaba rodando.
Johnson murió al instante a raíz de los disparos de los guardaespaldas de Colombo. Joseph Colombo murió en mayo de 1978.
Los críticos creen que en los últimos 50 años 'El Padrino' se ha impregnado en la cultura y ha envejecido tan bien como un buen vino italiano.
"Fue un punto de inflexión en el cine en muchos sentidos. El atractivo duradero de la película reside en la mezcla de fascinación, atracción y terror, y en la complejidad de unos personajes creíbles pero con defectos, siniestros pero profundamente humanos", dijo Dom Foulsham, profesor de cine y televisión a Mirror UK.
Basta ver el trabajo de James Caan, quien interpretó al impulsivo Sonny. El actor estudió los gestos de los gánsteres que se escondían tras las cámaras para poder representarlos mejor.
El resultado fue una película tan auténtica que ganó la aprobación de la propia mafia.
El término Padrino fue inventado por Mario Puzo, pero la influencia de la película fue tan grande que los mafiosos reales no tardaron en utilizarlo.
'El Padrino' ganó como la mejor película en los Premios de la Academia. Brando se llevó la estatuilla como mejor actor, mientras Coppola y Puzo compartieron el premio al mejor guión adaptado.
evr