No solo buscará las nominaciones al Oscar y el Gotham. Tótem, la nueva película de Lila Avilés se convirtió en la máxima ganadora del Festival Internacional de Cine de Morelia. Esta historia que pone en pantalla el proceso que enfrenta una niña ante la muerte de su padre obtuvo los premios principales del FICM: Mejor Largometraje Mexicano y Mejor Dirección.
“Qué regreso a casa, no puedo decir más que esta película ha sido una locura total, amo ferozmente ser cineasta, agradezco a todo mi equipo por su trabajo. Después de cada escena hacíamos un baile e iba así: el baile de la victoria”, dijo Lila Avilés, al subir al escenario, donde mostró al público cómo realizaban su ritual de baile durante el rodaje.
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Ahí, sobre el escenario, Lila agradeció el trabajo de su protagonista, la pequeña Naíma Sentíes, a quien cargó emocionada y le dio el micrófono para que compartiera algunas palabras; ante el nerviosismo y la emoción, la actriz infantil que dio vida a Sol solo pudo expresar una frase en la que se resumió su sentir: “Estoy muy contenta, no sé qué decir”.
Después del totémico ritual de baile y las breves palabras de su protagonista, Montserrat Marañón tomó la palabra para agradecer al festival: “Gracias Morelia, está bien chipocludo este festival”, dijo la actriz, quien da vida a Nuria, la tía de Sol. La película narra lo ocurrido con Sol y su familia durante la preparación de un día especial para Mateo, el padre de Sol.
Como cada año, los directivos del FICM enviaron un mensaje a la industria: “el cine en muchos países del mundo es un acto de resistencia y la comunidad cultural resiste. La vocación de la cultura no es resistir es construir, pero resiste porque intentan controlarla o peor aún, atacarla”, explicó Cuauhtémoc Cárdenas Batel, vicepresidente del FICM.
“Cuando se fueron los que en otros tiempos atacaron a la cultura, nosotros estábamos resistiendo y cuando se vayan los que hoy la desprecian, seguiremos resistiendo. No habrá un mejor país, ni un mundo más justo sin la cultura, seguimos esperando que quienes gobiernan acepten nuestra invitación a construir juntos”, agregó Cárdenas Batel.
Tatiana Huezo también se corona
Entre los ganadores de la vigésimo primera edición del FICM destacó El Eco, un documental de Tatiana Huezo que suele describir como la aproximación a una comunidad campesina, “donde todo ocurre por primera y última vez”. El eco obtuvo los premios al Mejor Documental, Premio del Público y Mejor Documental Creado por una Mujer.
“Hace años trabajé con temas doloroso, porque los cineastas hablamos de las cosas que nos preocupan, de los tiempos que nos tocó vivir, pero tenía ganas de respirar, quitar esa sombra y acercarme a la luz, así llegué a El eco, una profunda belleza humana de actos cotidianos como el cuidar al otro, es una película con mucha luz”, explicó Tatiana Huezo.
Antes de bajar del escenario, la cineasta aprovechó para enviar luz a quienes enfrentan los estragos del huracán Otis, “esta noche el corazón está en Acapulco y esta película, entre muchas otras cosas, habla de la fragilidad que hay en el mundo campesino. A ellos les está tocando durísimo este clima que arrasa con todo y provoca inundaciones”, dijo.
Quien también tomó el micrófono para enviar sus mejores deseos a los habitantes de Acapulco fue Elisa Miller. La realizadora obtuvo el premio al Mejor Guión Adaptado por Temporada de huracanes, “quisiera mencionar al huracán real que azota nuestras costas, eso me tiene consternada”, dijo previo a agradecer a Fernanda Melchor, autora de la novela.
En las categorías de actuación, el elenco de Todos los incendios obtuvo el Ojito a Mejor Actriz y el Ojito a Mejor Actor para Adriana Llabrés y Sebastián Rojano. El FICM concluyó después de una semana de actividades en las que estuvieron presentes Jodie Foster, Viggo Mortensen, Jessica Chastain, Eva Longoria, Kathleen Kennedy y Frank Marshall.
hc