El gran abanico de formas de hacer cine permite a sus creadores darle vuelo a la imaginación y aprovechar las herramientas a su alcance para transmitir emociones, ideas, miedo o risas, algo que en La Laguna está en boga por la cantidad de laguneros que hacen cine y que muestran su talento dentro y fuera de la región.
Llamado el séptimo arte, pretende envolver al espectador en una historia digna de contarse hasta involucrarse en ella. La cinematografía ha evolucionado al paso de las décadas desde su invención por los hermanos Lumiere a finales del siglo XIX, su expansión en el siglo XX con la llegada del cine sonoro en 1927, a color en 1929 y el cine digital en el 82.
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En la actualidad, el cine está en las salas y en la televisión, pero sobre todo está en la palma de la mano, con millones de cintas de todo el mundo disponibles con una conexión a internet o en las multiplataformas de películas, un fenómeno que a decir de especialistas de cine en la región, ha permeado en los jóvenes, en especial en los universitarios.
Vanessa Espinosa Díaz, fundadora de Plasma en Corto Centro Cinematográfico de La Laguna comentó:
“El cine siempre tiene efervescencia, es un arte muy llamativo y en la actualidad mucho más, porque tenemos mayor acceso a infinidad de plataformas para observar lo que queramos, en el momento y el género que queramos. Eso nos acerca más a intentar algunas producciones con las herramientas que se tengan”.
Clima estilo Hollywood
Para
Carlos Wong, lagunero que se desempeña actualmente como director de fotografía, aunque históricamente la región ha exportado talento, ahora hay esfuerzos por formalizar una industria del cine en estas tierras que cuentan con los medios, el talento y las locaciones necesarias, incluso con un clima estilo Hollywood.
“Históricamente La Laguna se ha conocido por haber mandado mucho talento fuera, sobre todo a la Ciudad de México, pero en los últimos años ha ido creciendo mucho la producción en la región lagunera y han venido producciones foráneas a usar las locaciones de aquí”.
“Poco a poco se ha intentado formalizar la industria del cine en La Laguna, aún no llegamos a eso pero hay mucho potencial. El clima es muy bueno, es como Hollywood, casi no llueve, hay sol todo el día, es fácil moverse y hay equipo técnico profesional de talla internacional”, compartió el camarógrafo con 12 años de trayectoria en cine.
A decir de Vanessa Espinosa, el interés en La Laguna por aprender cine no ha cesado, sin embargo, ahora hay mayor acceso a instrumentos para hacer producciones regionales o en las universidades, en especial las cámaras, que décadas atrás resultaba la herramienta básica más difícil de conseguir.
“Hace unos años 20 atrás era prácticamente imposible acceder siquiera a una cámara, era carísimo. Aquí en la comarca lagunera si querías aprender cine tenías que irte a la Ciudad de México porque no había más, hablo de unos 20 años, o hasta hace unos 10 años que ni siquiera había cursos en forma, hasta nosotros lo hacíamos muy esporádico”.
“La Comarca Lagunera está viviendo un momento muy importante porque cada día están saliendo más grupos. Aunque somos una comunidad pequeña, están emergiendo personas que están haciendo películas, videos musicales, cortometrajes, spots, pero con un ojo cinematográfico”, resaltó la cineasta lagunera.
Con 18 años en el Cineclub del Museo Arocena, el director de cine Carlos Saenz Peña, es testigo de la evolución del cine en La Laguna hasta percatarse que en los últimos años se acercan cada vez más personas para ver y hacer cine, lo que llamó un movimiento de jóvenes que están iniciando y que ya forman las bases para una industria cinematográfica lagunera.
“Hay mucho talento y hay mucha gente que se está especializando en cine aquí. Hay fuga de cerebros pero hay mucho más que antes. Hace 20 años no había dónde estudiar algo sobre cine, además si hacer cine es caro, antes era mucho más. Torreón tiene la ventaja de que hay luz todo el tiempo y tenemos muchos espacios de biodiversidad alrededor como dunas, río y bosque”.
Las universidades y los cortometrajes
Los cineastas laguneros coinciden en que aunado a las nuevas tecnologías y al mayor alcance de producciones de todo el mundo, las universidades de esta región han sido ese impulso que promueve el talento local por medio de clases de cine en la currícula escolar y participación en concursos y festivales de cine mediante cortometrajes.
“Las universidades ahora están empezando a dar clases de cine o tienen sus talleres de cine, empiezan a salir los concursos, pero también hay una mayor apertura. Lo de las universidades haciendo cortometrajes es algo muy nuevo, apenas está en boga, aunque hace años que la UAdeC, UAL, ULSA o Ibero ya hacían cortometrajes”.
Como un cambio radical es lo que considera el director Carlos Saenz lo que se ha visto en los últimos 15 a 10 años en la región lagunera, ya que en la actualidad se tienen más herramientas y mejor equipo y más barato, sin embargo, la falta de escuelas de cine ha sido aprovechado muy bien por las universidades.
“Generalmente hay más interés y han salido más cursos porque aquí no hay una especialización en cine. Habemos ahora muchos comunicólogos que entramos al mundo del cine porque no había de otra, pero teníamos elementos para hacerlo, hay muchos recursos en línea para aprender, hay videos en youtube o hay gente que comparte libros”.
Al respecto, Carlos Wong consideró que la mejor forma de adentrarse al universo del cine es consumiendo cine, pero cine de todo, desde bueno y malo, como local, nacional y extranjero
“Aunque todas las historias de alguna forma ya han sido contadas, no de la misma forma. Creo que la mejor manera de educarse es consumir cine, buen cine, mal cine; formar parte de la misma industria. Si no hay quién vea cine, no habrá quién lo haga y viceversa. Con la tecnología al alcance de todos siempre necesitaremos del talento humano para contar historias”.
Finalmente, el director de cámara actualmente del cortometraje La Piedra, dirigida por Saenz, opinó que para detonar la industria cinematográfica en La Laguna son indispensables los estímulos e incentivos a la producción local, donde se pueden aprovechar los espacios naturales.
“Se puede incentivar con apoyo económico al talento de aquí para poder producir, porque producir un corto o largometraje es caro y se involucran muchas personas para sacar adelante el proyecto”.
Algunas películas grabadas en La Laguna:
- “Vainilla”, Mayra Hermosillo
- “Pérdida Total” producida por Pato Safa
- “La Mexicana” Gore Verbinski
- “Blue Berry, la experiencia secreta” Jean-Michel Charlier
- “Dragon Ball” (2008) James Wong
- “Gerónimo” (1962) Arnold Laven
- “Los rollos perdidos de Pancho Villa” Gregorio Rocha
- “Salvando al soldado Pérez” Beto Gómez
Algunos cortometrajes laguneros:
- -“Camino a la mala noche” dirigido por Mino Rimada
- -“Los colores de mi huella”, dirigida por Brenda García López
- -“El turno del aullante”, dirigido por Bayron Norman
- -“Memoria de un pez”, con guión de Pato Rivera
- -“Melodía torrencial” dirigido por José Luis Saturno
- -“Monolith” dirigido por Raúl Quintana
- -”Lucas el grande” dirigido por Pato Rivera
- -”Travesía” de Leticia Maycotte
- -”Alero mío” producido por estudiantes de la UAL
- -“Cuando la noche me visitó” dirigido por Francisco De Borja Rodríguez Alanís, Circe Rosales Portugal y Carlos Francisco López Ramos, alumnos de la UNIPOLI
- -“Interferencia”, estudiantes de la UAdeC
- -”Carretera nocturna” dirigida por Sergio Eduardo Quiroz
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