Una de más once historias que compiten por el premio al Mejor Largometraje Mexicano es Las niñas bien, inspirada en las crónicas de Guadalupe Loaeza que logra un retrato del declive de la clase alta mexicana en los años ochenta; la cinta cuenta con la dirección de Alejandra Márquez.
“Fue un reto extraño, nunca me imaginé llevar a la pantalla una adaptación de las crónicas de Guadalupe Loaeza, pero era importante hablar de la élite y la desigualdad social, para dar un panorama más amplio de un problema que nos atraviesa como sociedad”, dijo Alejandra Márquez.
La cinta pone en pantalla la crisis ocurrida a inicios de los años ochenta y centra su trama en la vida de Sofia (Ilse Salas), líder del grupo de amigas del club de tenis que se enfrenta a su caída social, la cual trata de disimular a toda costa sin lograrlo.
“Nos podríamos seguir riendo del clasismo que tenemos tatuado en esta sociedad, pero lo importante es que esta película tiene un tono adecuado que nos permite reflexionar sobre lo que era y es esta élite del país”, comentó Ilse Salas, al finalizar la función.
El proceso de investigación fue amplio y sobretodo la construcción de los personajes centrales, que requirió de adquirir nuevos conocimientos, incluidas clases de tenis.
“Nunca me había tocado trabajar con tanta precisión, desde el vestuario, hasta el tenis, tomamos clases para lograr el tono adecuado de la película, es algo que da angustia con este tipo de personajes porque están atadas a tantas reglas que debíamos saber de esa época”, comentó Johanna Murillo.
Las niñas bien cuenta con las actuaciones de Ilse Salas, Cassandra Ciangherotti, Paulina Gaytán y Johanna Murillo, llegará a la cartelera comercial en marzo del próximo año.
ES