En 1999, el Instituto de Cine Estadounidense (AFI) publicó una lista de las 50 mayores leyendas de la era dorada de Hollywood. Sólo tres de ellas siguen hoy vivas: Sophia Loren, de 84 años, Sidney Poitier, de 91, y Kirk Douglas.
El héroe de la mítica Espartaco cumple 102 años este domingo, con la sorpresa de quien no esperó nunca vivir más de un siglo y la convicción de haber tenido "una vida maravillosa", de la que hace balance en una entrevista.
A la pregunta de cómo se siente con 102 años y si siente la edad a sus espaldas, reacciona con pocas palabras: "Nunca pensé que superaría los cien años, pero puedo con ello".
-Celebrará su 102 cumpleaños con familia y amigos. ¿Quién le hubiera gustado que le acompañara de los viejos tiempos?
Douglas: Extraño a viejos amigos como Burt Lancaster. Lo llamaba 'Boit' y el me llamba 'Koik'. Era un maravilloso amigo, lo echo mucho de menos.
-¿Qué desea para su 102 cumpleaños?
Douglas: Que el mundo sea un lugar seguro para nuestros hijos y nietos. En estos momentos hay tanta hostilidad, me gustaría que la gente se tratara con más bondad y respeto.
-¿De qué está agradecido al pensar en su carrera?
Douglas: Estoy agradecido de haber tenido una carrera tan larga y maravillosa. He interpretado tantos papeles y he viajado a países fantásticos en mis giras para la USIA (Agencia de Información de los Estados Unidos, un organismo diplomático dedicado a difundir una buena imagen del país durante la Guerra Fría).
Después de mi infarto me hice escritor y escribí 11 libros. Ahora trabajo en el décimo segundo.
-Poco antes de la elección de Donald Trump(como presidente de Estados Unidos) alertó en un blog en el HuffingtonPost de los peligros de los discursos de odio y la hostilidad. ¿Qué le preocupa en estos momentos?
Douglas: Siempre hay alguna preocupación. El mundo es un caos y tenemos que poner orden a esta confusión para nuestros hijos y nietos. Todos los días hay tiroteos, desde escuelas hasta sinagogas. Las personas sin hogar son humilladas y asesinadas. El mundo está tan dividido, eso debe cambiar.
-Como hijo de emigrantes rusos judíos en Nueva York creció en la pobreza. ¿Qué recuerdos tiene de su infancia?
Douglas: Mi madre me enseñó a ayudar siempre a los que eran aún más pobres. En nuestra vivienda teníamos un pequeño bote de hojalata, un "pushke" clavado a la pared. "Pushke" es una palabra judía y significa bote de hojalata, pero es más bien una hucha. Allí reuníamos monedas para un buen fin.
Apenas teníamos qué comer nosotros y nuestro "pushke" nunca estuvo lleno. Pero la Torá (libro religiosos judíos) exige dar algo a los pobres. Vivíamos junto a vías del tren y con frecuencia llamaban mendigos a la puerta. Mi madre siempre tenía algo para ellos.
-¿Tiene una lista de cosas que le gustaría hacer antes de morir?
Douglas: No tengo ninguna lista de ese tipo. He tenido una vida maravillosa y tengo una familia fantástica. Estoy agradecido por lo que se me ha dado.
Kirk Douglas nació el 9 de diciembre de 1916 en Nueva York, en los años 50 se convirtió en una demandada estrella de cine conocida sobre todo por sus papeles de héroe, destacando la película Espartaco.
Fue nominado en tres ocasiones al Oscar como Mejor actor y en 1996 recibió el galardón de honor a su carrera. Es padre de cuatro hijos, está casado en segundas nupcias desde 1954 con Anne Bydens, una alemana de Hannover.
Su hijo mayor, Michael Douglas, siguió sus pasos y es uno de los actores y productores más conocidos de Hollywood.
DIGL