“Guillermo ha descrito a su Pinocho como una metáfora de Frankenstein, él mismo lo ha expresado. Mi perspectiva es una gran historia, logra que su personaje sea muy entrañable, porque hizo de algo muy pequeño algo extraordinario, el guión es fantástico y la manufactura fue la mejor, muy escrupulosa, con especialistas que veían cada frame de cabo a rabo para que estuviera perfecto”, dijo la cineasta Rita Basulto en entrevista con MILENIO.
El director mexicano invirtió varios años para consolidar el sueño de crear su propia versión animada de Pinocho; por fin, el cineasta y Netflix lanzaron un primer avance de esta película que está ambientada en el ascenso del fascismo en la Italia de Mussolini. La idea que propone el mexicano de este cuento creado por Carlo Collodi es “completamente distinta” a lo que se conoce del personaje, es como una metáfora de Frankenstein.
Parte de este trabajo que llegará a Netflix rumbo al cierre de este año contó con un sello mexicano. Y es que, desde que Guillermo anunció que su proyecto musical quedó en manos de Netflix, tuvo la intención de que parte del trabajo de animación en Stop Motion se desarrollara en el Taller de Chucho, los estudios de animación ubicados en Jalisco, que él mismo impulsó en colaboración con el Festival Internacional de Cine de Guadalajara.
“Con este Pinocho van a llorar, les va a arrancar un cachito de alma, es súper conmovedora; no es una historia facilita, te hace cuestionarte y pensar. Me identifico con Pinocho porque algunos amigos me dicen que soy Gepetto y que Dante, mi hijo, es Pinocho. Dante llegó a mi vida de una forma mágica como el muñeco; es un niño muy deseado, amo dedicarme a esto y que mi vida sea la de esa Gepetta llena de creatividad”, agregó la cineasta.
El Taller de Chucho
Rita Basulto fue elegida como directora de la segunda unidad de Pinocho, con sede en el Taller de Chucho, lo cual representó una gran oportunidad en su materia. Al equipo mexicano se sumaron otros talentos locales, entre ellos “los animadores Sergio Valdivia, Luis Tellez y René Castillo; en cámara participaron cuatro, entre ellos Gilberto Torres; David Mancilla en el Motion Control; y Pepe Escoto me ayudó en un montón de cosas, hizo Grid, staff e iluminación, no me quiero olvidar de ninguno, pero fue un gran trabajo en equipo”, dijo.
En su momento, Guillermo del Toro comentó a un medio internacional que su versión de Pinocho era una historia muy personal, “la otra cara de la moneda siempre ha sido Pinocho y Frankenstein, son la misma historia. Es diferente a cualquier versión de la historia que se haya visto. Pinocho trata sobre lo que hace que un humano sea humano y lo que hace que un humano sea un títere; está ambientada en el ascenso de Mussolini en la Italia fascista”.
Para este trabajo, el mexicano contó con el apoyo de Mark Gustafson, quien se sumó como codirector del proyecto. En todo momento, ambos estuvieron al pendiente del trabajo que se realizó en México, y aunque fueron solo alrededor de cuatro minutos, una producción de animación en Stop Motion y musical requirió seis meses de trabajo constante, del cual cada mexicano involucrado aprendió de los mejores, y aun nivel de calidad máximo.
“Había ocasiones en las que decían ‘el traje tiene tres pelusas, quítenlas, por favor’, era un nivel de control de calidad maravilloso, además de los comentarios tan enriquecedores de Guillermo del Toro y de Mark Gustafson, lo que buscaban en cada escena era algo complejo, crearon una metodología tan clara y específica, que nos enriqueció a todos y hará que nuestro cine de animación, de Stop Motion, sea más visible en el mundo”, dijo Basulto.
Rita compartió la emoción de participar en una producción de este nivel: “Quienes trabajaron en Pinocho y ya traen sus proyectos más avanzados, tendrán un nivel distinto de creación, ya están buscando financiamientos y la forma de llegar a estos resultados de una forma más consciente, gracias a esta experiencia, no es lo mismo estar de fuera observando que hacer una producción como esta de animación con Guillermo”, agregó.
Durante los seis meses de Pinocho en México se construyeron seis sets de Stop Motion y varios personajes, “algunos estaban en caliente y otros en frio, los personajes se debían acomodar de una forma especial para que no faltaran en uno u otro set, tenía que haber una planeación exhaustiva para que los animadores pudieran trabajar, mi reto fue poder trabajar en equipo”, comentó Rita sobre el proyecto que se estrena en Netflix en diciembre de este año.
Mujeres en el cine
Rita Basulto recibió la invitación del Festival Internacional de Cine de Morelia para unirse al Compendio de Cineastas Contemporáneas, que promueve una industria cinematográfica con perspectiva de género.“Esta iniciativa de Daniela Michel, es un espacio muy interesante para mostrar los proyectos de mujeres tan talentosas, es como volcarse al pasado y narrar cómo llegamos a donde llegamos”, dijo Rita.
bgpa