Después de 41 años de su lanzamiento, Steven Spielberg admitiò que fue un error censurar una parte de E.T. El extraterrestre con el objetivo de mantener un tono adecuado para todas las edades. Esta película de ciencia ficción es reconocida como una de las más importantes en la historia del cine y ha alcanzado un estatus de culto en el género familiar.
“Un pequeño extraterrestre de otro planeta queda abandonado en la Tierra cuando su nave se olvida de él. Está completamente solo y asustado hasta que Elliott, un niño de nueve años, lo encuentra y decide esconderlo en su casa para protegerlo. El chico y sus hermanos intentarán encontrar la forma de devolver al extraterrestre a su planeta antes de que lo encuentren los científicos y la policía”, dice la sinopsis oficial.
La escena censurada
La película original de 1982 incluía una secuencia en donde un grupo de policías perseguían a los niños con armas en las manos. Pero Spielberg las editó transformándolas digitalmente en walkie talkies para el reestreno del filme en honor al vigésimo aniversario en 2002.
Según ha confesado durante su masterclass en el marco del evento Time 100 Summit, el cineasta se arrepiente de haber tomado esa decisión.
"Fue un error. No debería haberlo hecho. 'E.T.' es un producto de su época. Ninguna película debería ser revisada en base a los puntos de vista que tenemos ahora, ya sea de forma voluntaria o porque nos obligan a mirar a través de ellos. 'E.T.' fue una película en la que fui sensible al hecho de que agentes federales se acercasen a los niños con armas de fuego visibles, y pensé que podría cambiarlas por walkie-talkies... Pasaron los años y cambié mis propias opiniones. Nunca debería haber tocado los archivos de mi propio trabajo, y no recomiendo a nadie que lo haga. Todas nuestras películas son una especie de señal de dónde estábamos cuando las hicimos, dónde estaba el mundo y qué estaba recibiendo el mundo cuando sacamos a la luz esas historias. Así que lamento realmente haber hecho eso".
Durante la conversación, el moderador recordó a Steven Spielberg que no fue el único director en tomar decisiones similares al estrenar algunos productos de entretenimiento.
Como ejemplo, mencionó a Roald Dahl, cuya obra ha sido modificada recientemente para omitir ciertos contenidos sensibles para los lectores actuales.
Spielberg respondió con una broma y luego concluyó con una frase contundente: "Es nuestra historia y nuestro patrimonio cultural. No creo en la censura de ese tipo".
A.G.