La coreógrafa Priscila Hernández platicó de 'Bardo'; “Iñárritu llamó a los mejores mexicanos”

El cineasta Alejandro González Iñárritu tenía claras las sensaciones que deseaba transmitir a través de Bardo, su propuesta cinematográfica. Lo que el director no imaginó fue que para lograrlo necesitaría bailarines profesionales cuyo nivel respondiera al ritmo y dinámica que las escenas precisaban.

Prisicila Hernández, creadora de la secuencia del Día de Muertos en el Zócalo que aparece en la cinta de James Bond, Spectre, fue la elegida para confeccionar cuidadosamente algunas escenas de Bardo.

¿Cómo fue el proyecto coreográfico de Bardo?

Me habló la productora que empezó Bardo, y me dijo que estaba trabajando con Alejandro y que querían tener una junta conmigo. Él tenía muy claro lo que quería, explicaba: “No se trata de un impacto, no es una bala, es que simplemente tienes vida y de pronto dejas de tenerla”. Nos empezamos a dar cuenta de la complejidad de la escena de los caídos en el Centro Histórico cuando de pronto nos agarró la pandemia. En ese tiempo la producción paró; yo ocupé esos meses para trabajar con mi equipo.

Sobre la escena de la banda de guerra, lo importante es que

Regularmente no hacen las cosas y movimientos que se ven en el tráiler. Es una sorpresa, van a ver que es muy graciosa. Luego está la escena de El California, cuando Daniel Giménez Cacho baila con Jimena de la Madrid; ese es otro universo. Es latino, de fiesta y es rumba. Es la parte que me encanta de mi trabajo, nunca me aburro, siempre hago una cosa, luego otra y otra.

¿Qué temas y de qué manera se exponen coreográficamente?

El sentido del humor de Alejandro es muy particular, hay que estar pendiente del discurso político hacia muchas visiones que pasan en México. Son imágenes surrealistas, cosas que piensas que pueden ser algo normal, y no lo son. La película trata temas muy profundos: cuestiones políticas, migración, inmigrantes, inseguridad, desaparecidos. Y es cuestión de que cada persona que vea la película identifique lo que le hace sentir, cada quien la va a absorber diferente.

Como artista me interesa hablar de la política del país. Más allá de un discurso estrictamente bello, para mí es un privilegio poder hablar de eso a través de mi danza. Sin duda invito a verla, a parte de que la manufactura es espectacular, te deja reflexionando. Es una poesía visual.

Lo mejor de México

La artista mexicana es creadora de Reves Agency, un proyecto que desde 2008 recluta a los mejores bailarines de todos los estilos dancísticos posibles. Priscila Hernández tomó de esta agencia a los mejores para cumplir con las expectativas del cineasta mexicano.

“Alejandro decía que quería ver musicalidad en la escena de los caídos en el Centro Histórico. ‘Necesito que caigan más dinámicos’, nos dijo. Él es muy melómano y musical, tuvimos que crear una música para esa escena que, ojo, no es la que se oye en la película. Se tuvo que hacer para que los bailarines cayeran en el lugar y segundo preciso en que la cámara pasa por detrás. Si no estaban todos perfectos, no funcionaba”, dijo Priscila en entrevista.

¿Qué impacto esperas de tu trabajo en la cinta?

Mostrar que la coreografía es una ventana. Es un reto ser coreógrafa. Desde 1938 ya no se da Óscar a Mejor coreógrafo, y no sabemos por qué, pero ese lugar que teníamos en la industria, ahora sin reconocimiento, lo seguimos teniendo. Me gustaría resaltar el talento que hay en México; el nivel de bailarines es espectacular, en todo tipo de danzas somos súper ricos. Tenemos una diversidad brutal.

El desfile de Día de Muertos de la película Spectre, del director Sam Mendez, generó controversia en México. La opinión pública se dividió a favor y en contra. Priscila Hernández declaró que la idea fue del director; ella estuvo a cargo del concepto artístico y la coreografía, que desarrolló con devoción y respeto por la cultura mexicana.

¿Qué mensaje das a quienes desean trabajar como bailarines en el cine?

Que valoren la danza. Hay gente que entrena mucho, son atletas y artistas. A veces el problema es que tú sales de la escuela y solamente hay dos compañías que te contratan y a las que viene todo Latinoamérica y Europa a hacer audición. Es muy complicado para un bailarín mexicano salir, por eso es importante diversificarse: bailar, cantar, actuar. Deberíamos de ayudar a que los chavitos pues bailaran otras cosas: “Yo quiero hacer musical, yo quiero bailar en show, yo quiero bailar con Bad Bunny”, qué sé yo, pero que salieran con más herramientas. Trabajar en cultura, gestión cultural, abrir nuestra mente un poquito más.

DAG