Gritos, lágrimas y suspiros aderezan el concierto de Enrique Iglesias, quien apenas salió al escenario del Auditorio Nacional, provocó la histeria del público que llenó el foro. A las 9 de la noche, el cantante apareció en la sala haciendo realidad el sueño de sus invitadas, pues de las 10 mil almas un 80 por ciento eran mujeres que gritaban al menor movimiento del anfitrión que inició la fiesta con "Move to Miami".
El sofisticado equipo de producción, en el que los rayos láser, las pantallas leds y el humo enmarcan su canto, lo acompañó en “Freak”, “I Like How It Feels” y “Heartbeat”. Y conforme los minutos pasaban y la noche crecía, el ambiente mejoraba,así encontró eco en “Duele” y “Bailamos”.
Se fue a tocar las percusiones, en las que se animó a participar. Después, y para aprovechar el pasillo que dividió el escenario, se acercó con sus músicos al público de la sección principal, caminó de forma sexy y se puso romántico valiéndose de temas como “Perdedor”.
Orgullo y ritmo
La reacción de sus fans provocaba sonrisas en el rostro del español y también que levantara los brazos incitando a sus invitados a emular sus movimientos. “Esas manos al cielo México”, expresó antes de que se dirigiera a sus fans.
“Cómo pasan los años México, se me ponen los pelos de punta de pensar la primera vez que estuve aquí hace veinte y pico de años, muchas gracias por estar aquí”, dijo y siguió el momento íntimo con “El bajo”.
Una vez más volvió a dirigirse al público y lo hizo como preámbulo al tema que dijo escribió para pedir perdón a su novia. “Yo llevo 17 años con mi novia, ha habido momentos buenos, momentos malos, momentos en los que... chíngate.… pero en específico hubo dos veces que hasta tuve que escribir una canción para pedirle perdón”, expresó mientras en las notas de “Loco” empezaron a escucharse por la sala.
Nostalgia en escena
En esa escena además del coro del público lo acompañó “Celia”, una de sus dos coristas y para quien pidió “un aplauso”.
Después siguió con “Yelow”, pero antes compartió: “Cuando era un chaval había canciones que me encantaban y dije alguna vez voy a escribir una canción como esa.
“He escrito muchas que no son muy buenas, y uno a veces dice: ‘Ojalá la hubiera escrito esta”’, aseguró Igklesias, quien durante la noche estuvo muy activo con sus seguidores, a quienes platicó momentos importantes de su vida y su carrera.
La fiesta y toda la parafernalia volvió a la sala con “Be With You” y “Escape”. Sin embargo lo mejor estaba por venir, especialmente luego de que dijo: “Aquí empezó todo, en México ciudad”, y así siguió con “Nunca te olvidaré”.
Para entonces ya se había dado el primer cambio de look, Iglesias dejó la camisa negra que portaba, por una playera blanca y así siguió provocando a sus fans. “Mi vida ha cambiado mucho en los últimos dos años. Solo hay dos sitios donde quiero estar, uno es con mis hijos y otro es aquí con vosotros”, expresó y los gritos alcanzaron mayor dimensión, así como el derroche de energía que provocó en la última parte de la fiesta con “Hero”, “El Perdón” , “Bailando” y “I Like It”.
Dejándose querer
En medio de sus clásicos el cantante se dejó querer por sus cientos de fans, quienes lo ovacionaron.
Ritmo y sabor
Cuando llegó el ritmo y el sabor Enrique se mostró dispuesto a bailar y acercarse con sus seguidoras.
Romántica velada
Los temas románticos también fueron una constante, donde el español le puso corazón a la velada.