Babo, el vocalista de Cartel de Santa se ha caracterizado por mostrar en redes sociales algunos aspectos de su vida como el amor que tiene por su singular mascota, una pantera negra. Ahora, Eduardo Dávalos, verdadero nombre del cantante reveló que hace unos años se sometió a un procedimiento para que le colocarán perlas en su miembro.
El pearling, práctica que se aplicó Babo consiste en que las personas con pene se coloquen en su miembro perlas o canicas, esto con la finalidad de que al momento de tener relaciones sexuales, su parejas tengan más placer.
- Te recomendamos "Le duró 4 horas el gusto al pelado": 'Babo', de Cartel de Santa, revela cómo fue el robo de su camioneta y perro Famosos
En una plática con En Cortinas, programa de Luisito Comunica y Berth Oh, Babo contó que hace 10 años se sometió al pearling, esto después de que escuchara sobre esta práctica en una expo de sexo.
“Este cotorreo que yo traigo se llama pearling. Se trata de levantar el pellejo del pene, lo atraviesas y metes una canica, una perla de teflón; a la hora que se erecta el miembro todo el tiempo se miran las canicas”.
El cantante contó cual es la función de las perlas que tiene colocadas en su parte íntima, además mencionó que fue él quien decidió en que parte de su miembro debían ser colocadas las canicas.
“Traigo seis canicas y cuatro costillas, las tres de arriba son para cuando estás en posiciones frontales con la morra, esas estimulan el punto G; cuando estás en posiciones donde la morra está dándote la espalda, las tres canicas de abajo dan igual en el punto G y las costillas están en las orillas para estimular los labios interiores de la mujer”.
Babo dijo que él ya sabía de este procedimiento ya que algunos amigos suyos se habían sometido al pearling.
“Yo ya sabía de ese rollo por mis compas que habían estado presos, porque en las cárceles de Estado Unidos se meten las canicas esas. Yo ya sabía el procedimiento, nada más que ellos se lo hacen muy rudimentariamente en la cárcel, porque no tienes un bisturí o con que atravesarte el pellejo”.
Finalmente, Babo reveló que cuando le colocaron las perlas le recomendaron no tener intimidad en dos meses para recuperarse, sin embargo, no lo hizo.
“No me aguanté los dos meses y estaba ahí de picosos y se me corrió una perla, sentí como un desgarro. Le hablé a aquel vato y me dijo que volviera a correr para delante (la perla) y pegarle unas cintas. Para la siguiente vez que según yo ya estaba cicatrizado, pero se volvió a correr y a la siguiente ya no pasó”.
PJG