El mundo de las redes sociales está de luto por la misteriosa muerte de Barbara Jankavski, una influencer brasileña de 31 años conocida como la 'Barbie humana', quien fue hallada sin vida dentro de una residencia en São Paulo tras haberse sometido a 27 cirugías estéticas para parecerse a una muñeca.
De acuerdo con medios locales, los servicios de emergencia acudieron al domicilio luego de recibir una llamada de auxilio el domingo. Aunque los paramédicos intentaron reanimarla varias veces, confirmaron su fallecimiento en el lugar.
Las autoridades abrieron una investigación por muerte sospechosa y se encuentran a la espera del resultado de la autopsia para determinar las causas exactas del deceso.
Una amiga que habría estado con Barbara la noche anterior declaró que la influencer se había lastimado un ojo horas antes de morir, aunque hasta ahora no se ha establecido si ese incidente tuvo relación con su muerte.
Durante los últimos años, Barbara se sometió a más de dos docenas de procedimientos quirúrgicos, con un gasto estimado superior a un millón de pesos, en su intento por lograr una apariencia de muñeca. Su radical transformación le valió el apodo de 'Inhuman Doll' y la llevó a participar en programas de televisión y campañas publicitarias.
En Instagram, donde sumaba más de 55 mil seguidores, compartía su proceso estético y su vida diaria. Apenas semanas atrás había publicado un video donde mostraba sus ojos enrojecidos y amoratados tras una de sus cirugías, bromeando: “La cicatriz ya casi ni se nota”.
La noticia de su muerte causó impacto entre sus seguidores, quienes llenaron sus redes de mensajes de despedida.
“No puedo creerlo. Te admiraba tanto. Descansa en paz”, escribió uno de sus fans.
“Viviste la vida que querías, y eso nos consuela un poco”, comentó otro usuario.
El caso de Jankavski se suma al de Fernanda Oliveira da Silva, conocida como Fernanda Maroca, una modelo fitness brasileña de 30 años que también fue encontrada sin vida en su casa de Lago Verde días antes.
Ambos fallecimientos han encendido las alertas sobre los riesgos de los procedimientos estéticos extremos y la presión por alcanzar estándares irreales de belleza en redes sociales.
JCM