Olivia Newton-John inmortalizó su imagen al interpretar a Sandy en la película Vaselina (1978), que protagonizó junto con John Travolta. Por ello, el anuncio de su muerte este lunes fue lamentada por el mundo del espectáculo e incluso el mismo y emblemático actor y cantante.
Sin embargo, Olivia Newton-John enfrentó durante los últimos años una enfermedad con la que tuvo que lidiar durante los últimos 30 años, pues fue diagnosticada en tres ocasiones.
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La lucha de Olivia Newton contra el cáncer de mama
En 1992, Olivia Newton fue diagnosticada por primera vez con cáncer de mama; sin embargo, gracias a una serie de tratamientos logró vencerlo por primera vez, mientras enfrentaba el duelo por la muerte de su padre ese mismo año.
Tras esto, Newton-John entró en el activismo para fundar en Australia el Olivia Newton-John Cancer and Wellness Research Centre, un centro de investigación y tratamiento para personas con cáncer que hasta hoy en día está en funciones.
Pero en 2013, poco después de que murió su hermana, regresaría nuevamente la enfermedad a la actriz británica para volver a vencerlo; pero no sería definitivo y en 2017 nuevamente los médicos encontrarían agentes cancerígenos que afectarían otras partes de su cuerpo.
"Soy una entre millones en esta lucha. No debería decir lucha... en este viaje", dijo en 2018 durante una entrevista para el programa Sunday Show. "Mucha gente lo ve como una lucha, y cada uno está en su derecho de considerarlo como quiera. Yo lo veo como parte de mi misión", agregó sobre su visión de la enfermedad.
Para ése entonces, Newton-John tenía cáncer en su etapa IV, es decir, en el que "se ha diseminado (metástasis) a órganos lejanos", de acuerdo con MedlinePlus. Como consecuencia, el cáncer se le extendió hasta la columna, fracturándole la base de ésta; la actriz tuvo que volver a aprender a caminar.
"Estaba tan débil. Tenía un andador, un bastón y muletas, pero ahora estoy caminando", dijo para The Guardian.
Sin embargo, lo vivió con mucho más optimismo que las primeras dos veces: "Ha sido parte de mi vida durante tanto tiempo. Sentí que algo andaba mal. Es preocupante cuando vuelve, pero pensé: 'Lo superaré de nuevo'", dijo para el medio británico.
Dado que vivía en California, pudo acceder a un tratamiento médico de radiación acompañado por tratamientos naturales para el dolor, por lo cual consumía mariguana medicinal.
"Mi sueño es que en Australia pronto esté disponible para todos los pacientes de cáncer y para la gente que tiene un cáncer doloroso", dijo en la entrevista para el programa.
En 2019, reveló para el programa 60 minutes que tras su último diagnóstico le dijeron que le quedaban seis meses de vida; sin embargo, aseguró que decidió no pensar en ello y concentrarse en vivir al máximo.
"Si alguien te dice que te quedan seis meses de vida, es muy posible que sea así porque te mentalizas. Así que para mí, psicológicamente hablando, es mejor no tener idea alguna sobre el tiempo que me queda o expectativas de ninguna clase. Prefiero no pensar en ello y vivir el máximo posible", agregó.
Pero este 2022, tras su muerte, una fuente cercana a la actriz reveló a TMZ que falleció a causa de "el cáncer de mama metastásico".
En el anuncio de su muerte por parte de su esposo, John Easterling, reconoció el papel que jugó Newton-John como un 'símbolo de esperanza' y de inspiración, luego de haber vencido la enfermedad en un par de ocasiones y haber logrado superar expectativas médicas con gran pasión por la vida.
"Olivia ha sido un símbolo de triunfos y esperanza durante más de 30 años compartiendo su viaje con el cáncer de mama. Su inspiración curativa y su experiencia pionera con la medicina vegetal continúan con el Fondo de la Fundación Olivia Newton-John, dedicado a la investigación de la medicina vegetal y el cáncer. En lugar de flores, la familia pide que se hagan donaciones en su memoria", aseguró en Instagram.
caov