A principios de enero de este año Danna Ponce le otorgó el perdón a Coco Levy, productor al que en junio de 2022 demandó por abuso sexual, y desde entonces las cosas no han sido fáciles para la actriz, al contrario: tuvo que dejar la Ciudad de México debido a las amenazas que recibió.
En entrevista con el programa De primera mano, Danna reveló esta situación. “Desde el inicio he recibido muchísimas críticas, desde que alcé la voz hasta el día que desistí lo único que he recibido son ataques, critica y revictimización”, señaló.
Luego, Danna explicó que en su momento decidió hacer pública su denuncia contra el productor porque “si no metes presión por redes sociales y la sociedad no empieza a meterle presión a la ley, no pasa absolutamente. Esa es una estrategia que sirve, lamentablemente, porque no tendría que ser así, tendrían que atender a cualquier persona que dice que le pasó algo, no solo porque tiene tantas vistas en redes sociales”.
“La estoy pasando fatal, la he pasado fatal un año entero y todavía quieren que me sienta avergonzada de alzar la voz y haber dicho lo que había pasado, cuando otras personas salieron a decir que les había pasado algo parecido a lo mío”, señaló la actriz.
Detalló que esta situación le ha desencadenado “ansiedad, depresión, ataques en medios, ataques en redes, mi familia empezó a recibir ataques de los cercanos porque todos quieren opinar, dar su punto de vista”.
Entonces, Danna Ponce confesó que recibió amenazas que la orillaron a abandonar temporalmente su residencia en la capital del país: “No pensé en salir de México pero sí me cambié de estado, estoy ahorita en Veracruz. No tardo en regresar a Ciudad de México, pero me tuve que salir porque estaba recibiendo amenazas serias, y cuando digo amenazas serias es una cosa de que recibí la amenaza y al otro día estaba agarrando un avión para venirme”.
“Estoy en el punto donde hay tanta resiliencia de mi parte que no estoy arrepentida de nada de lo que hice, es el camino de vida que estoy siguiendo y voy a seguir por ahí”, aseguró más adelante en la charla.
Asimismo, la actriz contó que las críticas que más le afectaron “eran las que venían de colegas actrices que me daban por loca, yo las escuchaba y decía ‘Ustedes saben cómo funciona también, por qué no en vez de decir eso y defenderlos a ellos, pueden quedarse calladas y no revictimizarme’, porque es mucho más fuerte entre nosotras, y no es una cuestión que solo nos pase a nosotras, es impresionante la enfermedad de sociedad que tenemos”.
Al final de la entrevista, la actriz compartió que decidió otorgarle el perdón al productor porque “me estaban dando unos ataques de ansiedad fuertísimos, nivel lastimarme. Lamentablemente mis papás pagaron los platos rotos de todo mi proceso porque les tocó ver mi peor versión y ahí estuvieron, apoyándome siempre. (…) Había una propuesta de parte de ellos de llegar a un acuerdo y la primera vez dije no, vamos a irnos a juicio. Entonces nos vamos a esta audiencia, que me rompió el corazón porque la jueza determinó que no era un peligro para mí, le quitaron la agravante, lo que me hizo estar desprotegida al 100 por ciento como víctima”.
hc