Omar Chaparro sufrió un intento de secuestro; "paré para agarrarme a golpes"

El conductor explicó que fue a su llegada a la Ciudad de México cuando vivió este evento traumático.

Omar Chaparro vivió un intento de secuestro | Instagram
Milenio Entretenimiento
Ciudad de México /

Un joven Omar Chaparro recién había llegado a la Ciudad de México desde el norte del país. Con poco conocimiento de una de las ciudades más caóticas del mundo, el conductor vivió un intento de secuestro cuando se encontraba manejando su auto en compañía de Rafa Balderrama en plena madrugada. 

Fue en una entrevista con Yordi Rosado que Omar Chaparro recordó ese momento que quedó grabado en su mente para siempre y de la particular forma en la que lo enfrentó y cómo pudo escapar de esa situación que puso en riesgo su vida. 

Omar Chaparro narra intento de secuestro

En dicha entrevista, Omar Chaparro detalló su peculiar forma que tiene para reaccionar a eventos difíciles, una de esas maneras es reírse. Eso fue lo que pasó cuando sufrió un intento de secuestro hace más de 20 años, en el ya lejano 2001. 

Chaparro recordó que se encontraba echando fiesta junto a Rafa Balderrama cuando de pronto, un auto sospechoso se les emparejó en Viaducto. 

"Yo estaba recién llegado a México, en el 2001. Iba en el coche con Carlos Estrada y Rafita Balderrama. Íbamos como a las tres de la mañana en Viaducto, en un Jetta Blanco. Recuerdo que me rebasa un coche y se me empieza a emparejar; estábamos en la fiesta. En mi mente yo pensé que quería echarse unas carreras", explicó. 
Así vivió Omar Chaparro su primer ataque de ansiedad

El pique era cada vez más intenso, por lo que Omar optó por detenerse con la firme intención de agarrarse a golpes con ese conductor que lo había estado provocando desde hace instantes, pero grande fue su sorpresa cuando se vio apuntado por dos armas. 

"Se me cerró, se empezó a frenar. Yo me paré para agarrarme a golpes, se metió mi espíritu broncudo. Cuando me paro, veo que hay otro coche atrás. Abre la puerta y saca un arma y el otro con otra pistola", continuó. 

Finalmente, pudo explicar cómo es que al ver esas dos armas hacia él, solo pudo acelerar lo más rápido posible para escapar. Lo hizo y mientras eso pasaba, una carcajada era lo único que podía expresar, mientras su amigo lloraba asustado.

"Metí primera, di el patinón, casi lo atropello y me salí por la lateral. Me fui a toda velocidad, ya no supe si me siguieron, pero yo estaba atacado de la risa. Tengo una forma muy extraña de reaccionar. Rafita lloró, se asustó; me dio mucha risa", finalizó. 

Mira aquí la entrevista:

DAG

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