Érika Buenfil es una de las celebridades que mayor relevancia ha cobrado durante la cuarentena. Esto debido al contenido que sube a sus redes sociales, principalmente TikTok, donde hace parodias o retos que provocan alegría a sus seguidores.
Pero no todo han sido momentos chistosos, pues la actriz también ha abierto su corazón para revelar anécdotas sobre las dificultades que ha tenido en su vida; por ejemplo, la reflexión que realizó este Día del Padre en Instagram sobre la responsabilidad que ha tenido y tiene con su hijo, Nicolás. Un mensaje que no dejó fuera el toque cómico, pues Buenfil se pintó un bigote para una foto que compartió junto a su pequeño.
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"Sé que muchos pensarán que soy solo la madre de Nico y que no puedo ocupar el lugar del padre. También sé que le he explicado mucho que su papá nunca ha estado para apoyarlo. Pero después de 15 años merezco felicitarme por que he cubierto necesidades, he protegido todo con amor, le he enseñados desde andar en bici, hasta cuidarlo y educarlo para ser un gran muchacho", dijo Érika en sus historias de Instagram.
La crianza de Nicolás no ha sido nada fácil para la actriz. Y es que incluso desde que estaba embarazada tuvo problemas, pues fue el momento en que se enteró que el padre de su en ese entonces bebé era casado: "Había salido en una revista la boda y la foto y todo y no querían que yo la viera... entonces bajo y todo el mundo en silencio", reveló durante una entrevista.
"Entonces sí soy todo para él, y en esta cuarentena nos hemos unido más, solos llenos de alegría y sonrisas hemos superados mil batallas. Entonces sí, feliz día para mi también, aunque digan que no. Besos con cariños a todos los buenos hombres que sí han sabido cumplir con la bella tarea de ser padre", agregó la actriz en su reflexión.
yhc