Niurka, famosa vedette, es una mujer que se ha destacado por sus polémicas. Sin embargo, no todo en su vida ha sido el escándalo con terceros, pues también ha enfrentado momentos difíciles en su vida privada. Tal como el que enfrentó con uno de uno de los padres de sus hijos. Uno de ellos le puso una pistola en la cabeza. Es decir, Niurka vivió violencia a manos de un hombre.
Fue en entrevista con Yordi Rosado en donde Niurka habló a detalle de su vida privada y de la relación que mantiene con los padres de sus hijos.
De acuerdo con su testimonio, fue su primer esposo, Federico, quien le apuntó con una pistola en la cabeza, pues tenía este tipo de armamento ya que trabajaba en la Fiscalía General de la República.
Recordó que ella conoció al padre de su primer hijo cuando ella tenía aproximadamente 20 años en una de sus giras. Después el hombre la fue a buscar a Cuba para que se casaran.
El enlance matrimonial se dio en su natal Cuba y se vistió de color negro. En ese entonces, él arregló todos los papeles para que ella pudiera vivir en México.
En aquel momento, el padre de su primer hijo le había prometido una vida llena de abundancia, la cual no vio, pues radicó en un departamento sin muebles de Mazatlán. Incluso, dormía en un colchón en el piso.
Todo iba ‘bien’. Sin embrago, todo cambió cuando se enteró de la infidelidad del hombre. Luego de que viajaran a otra entidad federativa, Baja California, y cuando ya había dado a luz a su primer bebé, recibió la amenaza de muerte de su entonces esposo.
“Inocentemente bien porque todo debía ser así. Yo empecé a abrir los ojos, me empecé a dar cuenta que no era lo que él decía. Llegaba a la casa con la ropa mal”, comunicó.
Aseguró que le encargó a su bebé a su madre, lo fue a buscar, pues llevaba varios días sin llegar a la casa. Al confrontarlo, él la encañonó y ante la impresión la famosa se orinó. El hombre la amenazó con matarla, así que regresó al departamento con su madre y su bebé.
“Una vez fui a reclamarle a uno de sus departamentos y fui a reclamarle y ahí fue donde jaló la pistola y me la puso aquí. Me hice pipí. Me dijo que ‘ya lo tenía hasta la madre, que me fuera a la casa si no quería que me metiera un balazo’. Me oriné, literal”, contó.
La madre de Niurka regresó al lugar a reclamarle a su yerno y a pedirle que a ella le pusiera el arma. Finalmente, se terminaron escapando del lugar.