La cantante de Kabah, Federica Quijano, reveló su vivencia en redes sociales, luego de que fue golpeada por su hijo adoptivo, Sebastián, quien desde los tres años fue diagnosticado con autismo.
Como resultado, la famosa requirió de asistencia médica en su domicilio y apareció con una férula en el brazo, como auxilio para recuperarse de la lesión.
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Federica Quijano revela lo que pasó
Por medio de sus historias en Instagram, la hermana del famoso Apio Quijano dio a conocer su sentir con relación al ser lastimada por su propio hijo.
"A veces, como mamá azul (color alusivo al espectro autista), es como una montaña rusa... hay días que Sebastián está increíble y que ves a tu hijo a los ojos, y te corresponde, y te ve y te abraza, y te ama... y tienes estos momentos que valoras muchisísimo como mamá".
La cantante aseguró, sin embargo, que hay días como los que pasa actualmente, en los que "crees que no has avanzado nada y que todos los logros que creíste que habías conseguido, van para atrás".
"Me duele el brazo pero me duele más el alma, me duele más el corazón; me duele más, de pronto, ver tan lejos a mi hijo", revela. "Sentirme tan ajena a lo que estás siguiendo, y eso duele más, por eso hoy quiero darles gracias por sus mensajes, llenos de amor, de buena vibra".
La cantante aseguró que es su batalla personal, asegurando que, incluso, la de cada persona con autismo en particular es distinta. En cuanto a sus sentimientos: "estoy muy molesto con él, y se vale, y aunque sé que tiene esa discapacidad, no deja de dolerme o no dejo de responder de una manera humana, con coraje, como, ¿por qué? Cuando él ni siquiera se está dando cuenta que me está lastimando así, y al rato se da cuenta y se siente mal".
"A veces siento que no hay salida, no sé si lo sientes ustedes y ya pasó, mañana será un día nuevo y un día mejor".
La cantante aseguró que se tomará un momento, aunque aseguró que no podía dormir al volver a pensar las cosas. Asimismo, agradeció a los médicos que acudieron a su casa, para poder curarla de su brazo.
"Seguirán viniendo días así, complicados. Lo único que me da más miedo es que él sigue creciendo y haciéndose más fuerte y yo más viejita. Me asusta el día que ya no pueda con él".
caov