El camino de Jorge Antonio López Mendicuti como fotógrafo de standuperos comenzó de forma fortuita: un día de 2012, por una de esas decisiones que no gozan de explicación, se conectó a Twitter, red social de la que no es un usuario frecuente, y en ese momento dio con un tuit de Gon Curiel que anunciaba un show en su ciudad de residencia, Querétaro.
Ante esto, el creativo originario de Salina Cruz, Oaxaca, se emocionó, pues ya conocía el stan up - gracias a humoristas estadunidenses como Pablo Francisco, Fluffy (Gabriel Iglesias), Jerry Seinfeld y Joan Rivers -, pero no había tenido la oportunidad de ver a exponentes nacionales.
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"Gon hizo una dinámica en Twitter, que insisto: yo no me metía mucho. Pero me gané un pase y le dije: 'Me gustaría llevar mi cámara', esto para tener un recuerdo. Me dijo: 'Adelante, haz lo que quieras'. Entonces llego, aplico las mismas reglas que en los conciertos, que para ese entonces llevaba como un año (haciendo fotos en eventos musicales), y le tomé fotos a él, fue el primer comediante que fotografié. Y también fotografié a Jurgan y Mau Jalife", señala el también licenciado en Derecho.
Tras esta primera experiencia, que tuvo lugar en el Teatrito La Carcajada y donde tuvo como 'arma' una Canon 100D, Mendicuti siguió yendo al recinto a retratar a los provocadores de risas.
"De repente me di cuenta que había comediantes que empezaban y no tenían fotos para promocionarse, y les decía: 'Yo les doy las mías, no me quita el sueño y lo disfruto'. Y de ahí me fui. (…) Me tocó ver ahí a Ricardo O'Farrill, Sofía Niño de Rivera, El Cojo Feliz, Diego Zanassi, Alexis de Anda, muchísimos que en ese entonces eran sus primero minutos", recuerda.
El fotógrafo del stand up mexicano
Actualmente, Mendicuti es reconocido, tanto por los comediantes como por los seguidores de estos, como el 'fotógrafo del stand up mexicano'. Pero esto no fue algo que él se planteó de inicio, sino que su intención primigenia era "disfrutarlo y agradecerlo fotografiando".
"Pasaron los años y me dijeron: 'Eres el fotógrafo del stand up', y sí, no hay nadie más que lo haga con ese amor por la comedia. Hay gente que han contratado para distintos shows, pero hacen un trabajo que a mí en lo personal no me gusta, porque creo que se enfocan demasiado en el escenario".
Y es que su trabajo busca seguir la estela de esos genios del lente legendarios que no sólo se plantaban en los conciertos, sino que también acudían a "los estudios de grabación, al backstage".
"Me considero no fotógrafo de los comediantes, sino fotógrafo de la escena como tal", afirma.
Respecto a su forma tan íntima de acercarse a los humoristas, que se refleja en sus retratos, señala que "ellos no me consideran ajeno. De hecho hubo un tiempo en que hice stand up, que me encantaba pero me gustaba más la parte de documentar. También me considero una persona cómica y tengo un humor que compagina con muchos humores de ellos, y además nunca los veo de abajo para arriba".
"No tengo que pretender nada, simplemente sucede. Hay una familiaridad", apunta el fotógrafo, que actualmente desarrolla la mayoría de su trabajo con una Canon Mark III y con un lente 70-300mm.
Lugares para retratos
La Caja Popular: "Toda la vida he fotografiado sin flash, me caga. Entonces, soy mucho de usar focos pelones, que hay uno ahí, en la bodega. Algunas de mis mejores fotos de retrato han sido ahí".
Teatro Metropólitan: "Hay un espacio en backstage que es largo, es altísimo, que las veces que he me tocado es porque hay mucha producción detrás, pero también hay mucho nervio. Yo trato de aprovechar los focos que llegan a poner, que si llegó un adorno de flores, que si hay un sillón".Tacos Tony y Mega Bandera (Ciudad Juárez): "No soy de preparar muchos mis fotos, pero tenía ideas que quería aprovechar ahí".
Panoramas
¿Cómo has notado el desarrollo del stand up, partiendo desde el primer show que viste, con Gon Curiel, al momento?
"Ahorita mucha gente que se sube de: 'Ya vi que hay especiales, campañas publicitarias, hay podcast, ser influencer'. Si algo se empieza a popularizar, inmediatamente vas a tener gente que lo haga por razones que tú no compaginas. Pero también, en los últimos años, he visto comediantes de los que al principio no esperaba nada y me fueron sorprendiendo.
En Querétaro están: Edgar Pilón, Paul Moreno y Erick Zamora, que el día que la gente los vea en otros lugares se van a sorprender un chingo. Y yo tengo mucha fe en 3 comediantes mujeres: Miriam Fraile, de Puebla; Frida Araujo, en Ciudad Juárez; y Grecia Castillo, que viene del norte pero ha estado trabajando en Ciudad de México. Tengo mi fe depositada en personas que veo en los cursos o tratando de subirse a los open mics".
¿Qué sientes al estar frente a un evento con la cámara en mano?
"Me hace feliz porque, insisto, no cualquiera haría lo que yo hago, con la necedad que lo hago, con la pinche paciencia, porque hay gente muy nefastita, que quiere sus fotos de un día para otro. Y reconozco que si no hubiera estado yo, el stand up hubiera seguido, pero siento que parte de mí le dio una imagen a cierto sector de la comedia".
¿Qué fue lo último que te hizo carcajearte?
"Ahorita vengo de echarme un mes y medio fuera, y vi nuevos comediantes, conviví con gente que no pude convivir en la pandemia. Principalmente estar con Rorri, Said, Alan, Chucho, el Tio Rober, El Cojo, entre grabaciones de La Hora Feliz y Escupir en el Tiempo; tener esos momentos con ellos, reírnos de estupidez y media, esa convivencia".
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yhc