Hoy Luis Miguel está cumpliendo 50 años y al igual que ha pasado, a lo largo de su vida, todas las interrogantes que se puedan generar en su entorno, especialmente con lo que tiene que ver con su vida personal, con sus sueños, con sus gustos, con sus alegrías y hasta con sus sufrimientos, no tienen una respuesta real.
Pues si bien es cierto que en abril de 2018 con el estreno de Luis Miguel, la serie; el cantante permitió compartir algunos sucesos de su historia; como lo ha vuelto a hacer en la segunda entrega de la producción que Netflix estrenará este año, lo cierto es que el artista sigue manteniendo el misticismo, ese halo que lo ha acompañado y que lo mantiene como un ser inalcanzable; justo como en la escena que se produce cada vez que se presenta en un escenario, cuando todos lo ven, lo escuchan, lo admiran, pero nadie sabe realmente qué es lo que piensa, lo que siente, lo que vive, porque él no permite que nadie se suba a su espacio, siempre se limita a saludar, sonreír y a hacer lo que siempre ha hecho lo que lo ha llevado a la posición a donde está, a cantar.
De hecho poco se sabe de él por sus propias palabras, pues todo su entorno siempre se ha bañado de especulación, desde su origen, hasta la polémica relación con su padre, Luis Rey; el destino de su madre, Basteri; y la relación que sostiene con sus hijos, Michelle Salas, Miguel y Daniel.
“Durante décadas muchas personas han hablado de mi vida, pero ha llegado el momento de que mi verdad salga a la luz. Versiones hay muchas, pero verdad solo hay una. Esta es mi historia”.
Esas son las frases con las que Luis Miguel promocionó su serie, de la que no dijo más públicamente, pues ni siquiera asistió a la presentación de la producción que es protagonizada por Diego Bonetta en la edad adulta.
A partir de entonces el ídolo que surgió siendo un adolescente que cantaba “Uno más uno dos enamorados” o “Decídete", constató la lealtad del cariño de sus fans y en otros la solidaridad ante la exposición de una vida, sí, llena de los lujos que acompañan a la fama, pero carente del más mínimo sentimiento en muchos momentos de su existir.
Sin embargo, aún con esas revelaciones en la serie, que generó polémica entre los personajes que lo han acompañado y que manifestaron su inconformidad por la verdad de Luis Miguel; el hermetismo que ha adoptado como su bandera, lo sigue acompañando y siendo parte de su éxito, porque el ídolo solo habla cuando quiero hacerlo.
Una de esas ocasiones especiales fue cuando frente a la prensa confirmó su paternidad en noviembre de 2007, cuando presentó su disco Navidades con Luis Miguel en Nueva York.
“No suelo hablar de mi vida privada pero ésta es una noticia tan bonita, tan festiva, que no tengo más remedio de decírselo a todo el mundo, es algo que no puedo contener y si hay que hacer alguna excepción en mi vida, es ésta”, dijo para confirmar que sería papá y añadir “es niño y se llamará Miguel”.
Renuente a hablar de sí mismo y de sus sentimientos, otra de las pocas ocasiones en la que compartió sus sueños fue cuando gozaba del éxito de su tercer disco de boleros, Romances, y en entrevista concedida al programa Lunes en vivo en 1997 en su visita a Chile, como parte de su gira internacional dijo:
“¿Cómo cantaría Romances, si tú no puedes sentir o vivir muchas emociones? De hecho parte de mis logros ha sido que mis experiencias personales las he ido encausado a mi música”.
En la misma entrevista con apenas 27 años y el éxito encima por haber adoptado el bolero, compartió cómo adoptó el bolero.
“Fue un accidente, en realidad, porque esa idea había surgido de repente con Armando Manzanero, con quien mi familia siempre tuvo una amistad, por lo que yo tuve contacto con grandes compositores y músicos, y entonces, un día se me ocurrió pensar de hacer un disco en el futuro que tuviera este tipo de género. Entonces llegó el momento de grabar un disco, y pensé si tengo compromiso con la disquera, pues lo hacemos y lo dejamos como catálogo”.
Sin embargo, el resultado sorprendió al propio Luis Miguel, y a la fecha le sigue dando una vigencia que jamás imaginó.
“Para Luis Miguel grabar boleros fue un cambio bastante fuerte, de cantarle a las niñas de 12 a 15 años a empezar a cantarle a la gente de todas las edades, que es lo que todavía hace ahora, por lo que se ha hecho un artista muy importante y grandioso”, dijo Armando Manzanero, quien produjo el primer disco de boleros de Luis Miguel y compartió la felicitación al intérprete.
“¡Qué bonito, sí me enteré (del cumpleaños 50 de Luis Miguel!”, eso me hace pensar que cuando trabaje con él la primera vez, apenas tendría 23 años, era un muchachito, qué bueno que ya alcanzó esa edad, es una edad muy bonita, muy linda”.
epc