Mariana Rodríguez Cantú, popular influencer y esposa del senador Samuel García, se volvió tendencia este miércoles luego de que la repostera Gabriela Elizondo la acusara de estar bloqueando su trabajo, pues según dijo está mezclando "el pasado con el presente", además expresó que no le parece justo que se metan con su negocio, en el que lleva más de un año enfocada.
A través de su cuenta de Instagram, Gabriela Elizondo habló de los problemas que ha tenido con Mariana Rodríguez, a quien acusó de impedir que su negocio de repostería siga creciendo.
"Llevo rato teniendo problemas con una persona en específico, que no entiendo por qué tanto 'hate', o sea, ni siquiera puedo (...) entender cómo existe tanto odio dentro de una persona para querer estar friegue y friegue y quererme estar bloqueando mi trabajo”, comenzó a relatar Gabriela Elizondo.
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La repostera aseguró que están intentando quitarle su cuenta y que no ha podido firmar algunos contratos con empresas porque la influencer los "bloquea".
"Resulta que ya no puedo comentar, no puedo 'taggear', no puedo poner música, no puedo hacer nada con mi cuenta. Todo lo bueno que hice durante este tiempo se va a ir. Me quieren quitar mi cuenta literalmente, ya me bloquearon todo, entonces pues no lo voy a permitir (...) En varias ocasiones estamos a segundos de firmar contratos con empresas y resulta que me lo bloquea”, comentó Elizondo.
Asimismo, Gabriela Elizondo dijo no entender por qué está mezclando el pasado con el presente
"Lo único que me da impotencia es porque estás mezclando un pasado con un presente (...) Si yo quedé en el pasado por qué estás tan traumada en el pasado de esa persona y no vives tu presente y lo disfrutas", dijo.
Gabriela Elizondo defiende su negocio
Más adelante, Gabriela Elizondo mencionó que no le importaría que se metieran con su imagen, pero dijo que ahora están frustrando su negocio, lo cual no va a permitir.
"Me valdría si es en contra de mi persona: Gabriela Elizondo, pero te estás metiendo ya con mi negocio. No está padre (...) El punto es que esto tiene que parar", confesó la repostera con lágrimas en los ojos.
La repostera reconoció que le fue difícil denunciar lo sucedido porque no le gusta entrar en polémicas, pues dijo estar enfocada en su trabajo.
"Me costó mucho trabajo atreverme a hablar de este tema públicamente porque los que llevan conmigo un año y medio ya, pues saben que no me gustan los chismes, la polémica y ese tipo de cosas. No va con mi persona y no me gusta, simplemente estoy muy ocupada en mi vida y en mi trabajo que no tengo tiempo", aseguró Gabriela Elizondo.
amt