Un juez en la Corte Federal del distrito este neoyorquino, ordenó la detención formal sin derecho a fianza del productor R. Kelly acusado de cinco cargos entre los que se incluyen explotación sexual y extorsión.
La asistente de la fiscalía, Elizabeth Geddes, adelantó que son 13 las víctimas y confió que el acusado intimidó a algunas de ellas para evitar que declararan en su contra.
Kelly, acusado de encerrar a sus víctimas y obligarlas a llamarlo Daddy, a través de sus abogados se declaró inocente durante su primera aparición en esta corte, la cual provocó tumultos entre seguidores y curiosos que deseaban presenciar la sesión.
Con un semblante de hartazgo el cantante de rap volteó varias veces al público para saludar a las mujeres presentes, algunas de ellas amigas suyas que viajaron desde Chicago para mostrarle su apoyo.
Cómo se informó el pasado julio, jueces de esta corte consideran que existen amplias evidencias para que el cantante sea juzgado pese a que él y sus abogados han insistido que ya ha sido exonerado por los mismos delitos. Sin embargo, la acusación presente ya escaló hacia el supuesto de que dirigió una empresa criminal en el lapso de dos décadas
Durante ese tiempo R. Kelly y sus empleados transportaron y explotaron sexualmente a niñas y mujeres en distintos estados de la Unión Americana. El cargo incluye coerción, secuestro y trabajo forzado.
La mañana de hoy los fiscales etiquetaron al músico como "un depredador sexual en serie" que ha mantenido dicho comportamiento al menos durante las dos recientes décadas.
De ser hallado culpable podría pasar al menos 15 años en prisión.
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