En más de una ocasión, Luis Gerardo Méndez ha sido reconocido por su actuación con múltiples nominaciones, como por ejemplo en 2014 en los premios Ariel por su protagonismo en la película Nosotros los nobles. También desató su popularidad al dar vida a Salvador Iglesias en la serie de Netflix, Club de cuervos.
Desde muy temprana edad, el popular actor mexicano se dio cuenta que la actuación era su escape de su complicada infancia. Sin embargo, su talento fue descubierto de una manera muy inesperada. Luis Gerardo Méndez recuerda que de joven no tenía amigos, incluso considera su adolescencia como un "infierno".
"Mi adolescencia fue un infierno, eso sí me acuerdo. Cuando eres niño todo es diversión pero en la secundaria no terminaba de pertenecer a ningún circulo. No tenía amigos, odiaba el recreo porque no tenía con quien platicar hasta que descubrí el taller de teatro", recuerda.
Luis Gerardo Méndez reconoce que durante su adolescencia fue tan introvertido que hacer amigos le resulto imposible, sin embargo, durante algunas clases lograba interactuar con otro joven, inesperadamente fue él quien lo motivó a entrar a la actuación.
Sin imaginárselo, el amigo del ahora actor, estaba abriendo las puertas para un largo y exitoso camino como el que ahora esta forjando Luis Gerardo.
"Cuando empecé a tener ya amigos por fin, el más popular de la escuela me dijo: 'Oye, w**. Tú deberías entrar al taller de teatro porque eres muy cagado" y como él era como mi sensei, le dije: "Ok, señor" y entré al taller de teatro", y así tuvo su primer acercamiento a la actuación.
En entrevista con Roberto Martínez para su podcast, Creativo, Méndez asegura que desde el primer momento hubo algo que le llamó la atención dentro del teatro: Cuando entré al taller de teatro dije: "Hay algo interesante aquí. No entendía muy bien que todavía"
jk