El sacerdote que ofició la misa durante el homenaje que se le realizó a Vicente Fernández en la Arena VFG, Óscar Sánchez Barba, también estuvo presente en las últimas horas de vida del cantante, pues se encargó de darle los santos óleos.
En entrevista con Ventaneando, el religioso recordó este momento: "Me llamó Gerardo desde el sábado 11. Yo estaba en misa de 7 y oía que alguien me llamaba, y era él: 'Que si puedes venir a darle la unción de los enfermos', pero el hijo ya quebrado, ya llorando. Y fui".
Óscar señaló que estaba reunida toda la familia del Charro de Huentitán: "Le rezamos y le puse los santos óleos; se los puse el día que llegó al hospital y cuando se fue, 8 horas antes de que Dios lo llamara, porque se fue el día 12, muy significativo también para él porque era muy guadalupano".
"Ahí estaban los nietos, le decían: 'Ahora le vas a cantar en el cielo a Dios', momentos fuertes y tuve el privilegio de estar ahí porque ellos me llamaron", añadió.
Asimismo, el religioso cree que al momento de la unción Vicente "estaba consciente, porque le hablaban al oído y él hacía señas de que entendía; le decía Cuquita 'Vámonos a casa' y él parecía que decía 'Casa'. Un momento muy emotivo, de un gran cariño, de una gran unión entre todos. Uno por uno fueron desfilando, abrazándolo, besándolo".
Por último, el sacerdote contó que mientras el cantante estuvo hospitalizado, "estuve en contacto todo el tiempo con Gerardo, pero no le preguntaba cómo estaba, solo le decía que mucho ánimo, porque estábamos toda la parroquia pidiendo por la salud de Vicente".
yh