Este jueves, Sergio Mayer acudió a una entrevista de radio con el locutor Jessie Cervantes para hablar de su participación en el reality La casa de los famosos, donde quedó en cuarto lugar.
De los temas que tocó, destacó el de su ingreso al programa, que en su momento le generó preocupación porque estaba "en negativo" debido a las críticas por el caso de Héctor Parra.
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Así llegó Sergio Mayer a La casa de los famosos
Esto lo abordó Mayer luego de que Cervantes le preguntó: "¿Quién te invitó a La casa de los famosos?".
"Me habían invitado para La casa de los famosos que se hace en Estados Unidos, la de Telemundo, que empezaba en enero", recordó el apodado Tata.
"De repente me habla un ejecutivo ahí en San Ángel y me dice 'Fíjate que este año Televisa compró la franquicia', de hecho fui el primero que firmaron, que fue por octubre o noviembre, y me dijo 'Necesitamos que estés aquí, es el proyecto del año, a ver cómo lo arreglas porque nos interesa que estés acá'".
El famoso aceptó la propuesta porque "Televisa es mi casa, siempre he estado con ellos de una u otra manera, ahí nació Garibaldi, ahí nació mi carrera".
Entonces, Sergio confesó que "no estaba convencido de entrar en cualquiera de las dos: primero, 57 años, irte a meter ahí a estas alturas que estás acostumbrado a un estilo de vida, a tu familia. Lo pensaba mucho".
"Además, por el hecho de estar en la política estás doblemente expuesto; cualquier cosa que dices o haces se magnifica, lo multiplican o lo pueden sacar de contexto, lo utilizan tus adversarios".
Pero lo que más le generó preocupación es que "me tocó una mala suerte que justo la semana en que iba a entrar a La casa estuve apoyando mucho un tema de abuso sexual a una menor (Alexa Hoffman) de una persona (Héctor Parra) que ya se dio el veredicto, sentencia. Y justamente esa semana me estuvieron golpeando mucho por ese tema".
"Entré no con cero, sino en negativo. Estaba preocupado porque no estaba padre todo lo que estaba pasando afuera, pero ya tenía el compromiso. Entré con mucho riesgo".
Incluso su esposa, Issabela Camil, le preguntó si estaba seguro de su decisión, a lo que Mayer le contestó: "No tengo duda de quién soy y de lo que voy a hacer, no tengo miedo ni absolutamente nada. A eso quiero entrar: para cambiar ese concepto de tanta madriza que me han dado por otro tipo de cosas que la gente no conoce o no sabe de mí".
hc