Hace unos días se dio a conocer que Sergio Mayer había sido hospitalizado de emergencia, tras examinarlo los doctores determinaron que el ex diputado tenía tres padecimientos: hipoacusia súbita, esofagitis aguda viral y lesión renal aguda. Todo esto provocó que Mayer perdiera la audición de uno de sus oídos, la cual poco a poco está regresando.
Fue este 14 de septiembre que a través de una conferencia de prensa, retomada por Sale el Sol, Sergio Mayer dio a conocer que ya había sido dado de alta, además que contó cómo se sentía después de haber estado en el hospital desde el pasado viernes 10 de septiembre.
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Aunque ya se encuentra mejor, Sergio Mayer detalló que la pérdida de la audición aún continúa, pero que con el paso de los días la he recuperado. Mencionó que escucha sonidos un poco extraños.
“Afortunadamente estoy en muy buenas manos, estoy tranquilo en cada una de las tres situaciones, si bien no tengo recuperado el oído, no sé cuanto tiempo vaya a tardar. Siento una cosa rara ahí, al principio era cero audición, poco a poco se está recuperando, pero sigo escuchando un hueco incluso como vocecitas”.
Sergio Mayer se mostró positivo después de lo que vivió hace unos días y se mostró agradecido porque durante muchos años se ha mantenido sano.
“Soy muy pragmático, muy resiliente y de inmediato estoy viendo hacia adelante y estoy agradecido porque dentro de 55 años he escuchado perfectamente bien. Dios me dio la gracia tenerlos durante tanto tiempo y estoy consciente de que las cosas se van atrofiando”.
El ex Garibaldi aclaró que el supuesto envenenamiento que se manejó que había sufrido se salió de contexto y en realidad sólo se trató de una intoxicación.
“No sabíamos si había yo comido algo mal, al decir envenenamiento puede ser algo que esté envenenado no que me hayan envenenado porque cuando se manejó eso me parece que se desvirtuó. Intoxicado era la palabra que hubieran utilizado, no sabíamos qué me estaba pasando”.
Finalmente, Sergio Mayer se defendió y aseguró que no inventó en ningún momento estar enfermo con tal de deslindarse de las demandas que tiene en su contra.
“De ninguna manera, el hecho de bajar el ritmo al estrés es una cosa, pero mi compromiso es que seguiré apoyando a las víctimas y les dije que iba a demostrar que las denuncias que están haciendo infundadas que es un juego mediático burdo, mezquino, que no tiene ningún sustento”.
PJG