Sin duda, uno de los grandes aciertos del director de Blonde, Andrew Dominik, fue elegir a Ana de Armas para interpretar a Marilyn Monroe. Con una actuación desgarradora y seductora, la actriz cubana se perfila para la temporada de premios más importantes del año, pero convertirse en la diva del cine no fue sencillo y se preparó durante casi un año para ello.
La cinta producida por Netflix es un proyecto que se vino gestando por varios años, tan sólo el rodaje duró 3 años. Ana de Armas fue la primera candidata del director para el papel y durante 9 meses se preparó con ayuda de maestros y un entrenador de acento para hacer frente al reto de dar vida a Norma Jeane.
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En una entrevista para ET, Ana de Armas reveló que pasaba más de tres horas en el departamento de maquillaje y peinado para transformarse en Marilyn Monroe.
"Ese fue un gran viaje de todos los días", dijo la actriz, que comenzó su carrera en la televisión española. "Eran unas tres horas para prepararme, todas las mañanas. Teníamos un equipo increíble de peluquería y maquillaje, y luego Jennifer, nuestra diseñadora de vestuario, también estuvo increíble".
Vaselina y prostéticos, así era la rutina de Ana de Armas en 'Blonde'
Durante el rodaje uno de los primeros pasos era cubrir su cabello oscuro con una especie de gorro y posteriormente le ponían una peluca rubia platinada, de ahí la fotografía en la que aparecía aparentemente calva que compartió hace unos meses en su cuenta de Instagram.
Uno de los detalles que descubrió el equipo es que Marilyn Monroe utilizaba vaselina antes de empezar la rutina de maquillaje, y con base en eso elaboraron un plan para que la piel de Ana de Armas luciera radiante.
"Marilyn siempre tenía ese hermoso brillo en las fotos. Su secreto era que usaba vaselina, porque era reflectante y devolvía una gran cantidad de luz aportándole mucho brillo", señaló Tina Roesler Kerwin, jefa de maquillaje de la película. "Optamos por algo más novedoso y mejor para la piel de Ana a largo plazo”.
La actriz, de 34 años, habló de los numerosos looks, muchos de ellos sacados de las icónicas películas de Marilyn, que utilizó durante las grabaciones.
"Tenemos más de 100 cambios de vestuario en la película, y todos son tan hermosos e icónicos en todo. Cada detalle es simplemente, ya sabes, perfecto. Entonces, fue realmente increíble".
Armas mencionó que está muy orgullosa del trabajo que ella y la producción han hecho: "Abarca 36 años. Entonces, ese proceso de envejecimiento, y las miradas muy icónicas o recreaciones de películas que se hicieron, todos los días cuando logramos esa apariencia nos mirábamos en el espejo y sabíamos que lo teníamos, era realmente hermoso".
amt