Sarah Brightman cumplió lo prometido el 2 de mayo de 2013 y conjugó en el escenario de la Arena Ciudad de México su potente voz, que le valió una ovación de pie por su interpretación de “Nessun Dorma”, con una odisea espacial, que incluso puso a volar en el escenario satélites artificiales, en el marco de su Dreamchaser World Tour.
A las 20:50 horas, la soprano inglesa apareció al centro del entarimado, con vestido negro, escote tipo halter y cabello suelto, engalanado con un tiara, para interpretar “Angel”, al terminar saludó a sus fans: “Buenas noches, damas y caballeros de la Ciudad de México, bienvenidos a mi show”.
Mientras en una pantalla gigante se proyectaban imágenes del espacio y un amanecer brillante, Sarah deleitó con su voz en “One Day Like This”, “Glosoli”, y rindió homenaje a una agrupación que pese a ser española, se siente muy mexicana, Mecano, con el corte “Hijo de la Luna” (en el que cambio a un vestido blanco) y continuó con “La luna”.
“Eperdu” e “It’s a Beautiful Day” dieron paso a un agradecimiento: “Damas y caballeros, estoy muy emocionada de estar aquí, en mi último show en México, así que gracias por venir”, dijo para compartir el escenario con el tenor suizo, Erkan Akin, en “Canto della Terra”.
Tras un receso de 20 minutos, regresó para ofrecer “Closer”, luego llegaron “Breathe Me”, “Figlio Perduto” y del espacio se fue a un bosque encantado de la década de los 50 en Japón en el corte “Kaze No Toorimichi”.
“Scarborough Fair” y “A Song Of India” fueron el preámbulo para el clímax de la velada; al lado de Akin una vez más hizo gala de que fue musa inspiradora de Andrew Lloyd Webber con The Phantom Of the Opera (otro aplauso de pie).
“Gracias, son un público maravilloso es ‘Time to say goodbye’”, dijo antes del encore.
Pero debido a los aplausos Sarah regresó para poner el punto final a la velada, con un vestido púrpura que hacía juego con la estrellas a sus espaldas, con “Venus And Mars” y con un traje negro cerró su recital, a las 23:00 horas, con “A Question Of Honour”.
Claves
- 15 mil espectadores.
- 7 millones de la taquilla, a nombre de Grupo Avalanz, fueron donados a los damnificados de Guerrero.