La violinista y compositora británica Lindsey Stirling regresará a México en agosto próximo para realizar una serie de presentaciones, en las cuales dará a conocer en vivo Brave enough, disco en el que hace una retrospectiva de lo que ha sido su vida.
Stirling visitará el 29 de agosto el Auditorio Citibanamex, en Monterrey, y un día después estará en la Ciudad de México, donde actuará en el Auditorio Nacional, para cerrar su gira por este país en el Teatro Diana de Guadalajara el 31 de agosto.
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Con este tercer álbum, la compositora miró hacia atrás, al viaje que ha sido su carrera hasta este momento y se hizo una pregunta fundamental.
“Básicamente escribí: 'Shatter me' acerca de mi problema de anorexia y cómo lo superé… Entonces pensé, ¿cuál es mi siguiente paso en este proceso? Y me di cuenta de que liberarme había sido sólo el principio. Para lograr continuar en este viaje debes decidir no regresar arrastrándote a ese escondite cuando las cosas se ponen difíciles”.
Cuando llegó el momento de trabajar en este disco, Lindsey enfrentó uno de los peores años de su vida. Al terminar su pasada gira mundial, Stirling regresó a Los Ángeles para comenzar a escribir en agosto de 2015. Su mejor amigo y pianista Gavi fue hospitalizado y murió poco tiempo después. Su influencia y su espíritu dejaron una gran marca en el proceso creativo de Lindsey.
"Esa ha sido una de las experiencias más duras que he tenido que vivir", comentó a través del documento. "Todo lo que quería era refugiarme en el trabajo, y enmascarar todos mis sentimientos. Pero debía sentirlos, dejar que se asentaran, y sobre todo expresarlos. Creo que nuestros seres queridos pueden estar cerca de nosotros aunque ya no estén físicamente aquí.
“Cada día en el estudio me ponía algo que me lo recordaba, ya fuera unas de sus viejas camisas, uno de sus gorros, un collar que él me había regalado… le pedía su ayuda de esa forma. Ahora siento su presencia a través de la música, porque sé que él estaba ahí, inspirándome. Cuando murió no sabía para dónde iba este álbum y resultó mucho más diferente de lo que había imaginado, y lo digo en el mejor sentido posible”.
En este disco colaboran Christina Perri; Rivers Cuomo, de Weezer, y Zedd, quien hizo equipo con ella para producir “Love is a feeling” [feat. Rooty]. Lindsey recibió estas voces con los brazos abiertos, lo que enriqueció la narrativa musical del álbum.
vmm