El ganador del Oscar, Ben Affleck, dijo que completó un programa residencial de rehabilitación por consumo de alcohol de 40 días, pero agregó que enfrentar la adicción es "una lucha difícil y de toda la vida".
Affleck, de 46 años y quien también entró a rehabilitación en 2017 y 2001, refirió en una publicación en su cuenta en Instagram que sigue siendo un paciente ambulatorio y agradeció a su familia, amigos y admiradores por su apoyo.
"Enfrentar cualquier adicción es una lucha difícil y de toda la vida. Por ello, uno nunca entra o sale realmente de tratamiento. Es un compromiso de tiempo completo. Estoy luchando por mí mismo y por mi familia", escribió.
El pasado 22 de agosto, el actor de 46 años decidió internarse con ayuda de su ex esposa Jennifer Garner, quien desde entonces lo ha apoyado para superar su enfermedad.
“El apoyo que he recibido de mi familia, colegas y fans significa mucho para mí de lo que puedo expresar. Me ha dado fortaleza y apoyo para hablar sobre mi enfermedad a otros”, escribió.
El actor afirmó que luchar contra cualquier tipo de adicción es algo que se hace durante toda la vida y por ello agradeció a aquellos que se han puesto en su lugar y que le han contado acerca de su experiencia para darle fortaleza.
"Como lo he recordado a mí mismo, si tienes un problema, buscar ayuda es señal de coraje, no de debilidad o fracaso”, detalló Affleck.
Reiteró su agradecimiento a aquellos que han estado cerca de él en el momento de su recuperación y espera que su experiencia sirva como ejemplo para quienes pasan por una situación similar.
Affleck tiene tres hijos con la actriz Jennifer Garner. La pareja se separó en 2015, pero Garner fue fotografiada en agosto llevando a Affleck a un centro de tratamiento en Los Angeles.
El actor se hizo famoso en 1998, cuando ganó el Oscar a mejor guión original por el drama En busca del destino junto a su amigo Matt Damon. En 2013, obtuvo el Oscar a mejor película por Argo, que produjo y dirigió.
La estrella de Batman vs Superman y Perdida ha hablado frecuentemente de sus problemas con el alcohol, que también agobiaron a su padre y a su hermano, el también actor Casey Affleck.
Casey dijo el mes pasado al programa de televisión "Entertainment Tonight" que junto a Ben son parte de una familia de alcohólicos.
"Ben es un adicto y un alcohólico. La mayoría de mis abuelos son alcohólicos. Mi padre es un alcohólico, de lo peor, y ha estado sobrio por unos 30 años. Yo he estado sobrio por unos seis años", sostuvo.
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