Michael Caine, quien ganó un Oscar por su papel en Hannah y sus hermanas de Woody Allen, ha descartado volver a trabajar con el director, según información del portal Variety.
En una entrevista ofrecida a The Guardian, Caine dijo que quedó "aturdido" por la acusación hecha contra Allen por la hija adoptiva del cineasta, Dylan Farrow. Ella mencionó que fue agredida sexualmente por su padre cuando era niña, lo cual el director niega.
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Caine dijo al tabloide inglés "Soy un mecenas de la NSPCC (Sociedad Nacional para la Prevención de la Crueldad hacia los Niños por sus siglas en inglés) y tengo opiniones muy firmes sobre la pedofilia. No puedo aceptar (la acusación), porque amaba a Woody y lo pasé muy bien con él.
Incluso le presenté a Mia (Farrow). No me arrepiento de haber trabajado con él, lo cual hice con total inocencia; pero no volvería a trabajar con él, no".
Caine se une a un creciente número de actores que han aparecido en películas de Allen pero que recientemente se han distanciado de él, incluyendo a Greta Gerwig, Mira Sorvino, Timothée Chalamet, Colin Firth y Rebecca Hall. Otros se han mantenido leales al director, incluidos Alec Baldwin y Diane Keaton.
ERV